La farmacéutica Rovi ha presentado sus resultados correspondientes al primer semestre del año. El beneficio neto de la compañía ha aumentado en un 58%, pasando de los 51 millones de euros que ganó en los primeros seis meses de 2021 hasta los 80,6 millones actuales. Además, el ebitda, es decir, el beneficio bruto de explotación ha pasado de 74 millones de euros a 115,8 millones, cifra que implica una subida interanual del 56%, según ha informado la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Rovi ha obtenido, en general, 381,3 millones de euros en ingresos en el primer semestre de 2022, un 31% más que en el mismo periodo de 2021 dónde alcanzó 290,6 millones. La farmacéutica madrileña ha experimentado un crecimiento en todas sus áreas, pero la fabricación a terceros sigue siendo la mayor responsable de los buenos números de la compañía. Este capítulo ha crecido un 76% hasta los 166,4 millones de euros frente a los 94,5 millones que logró en el primer semestre de 2021. Mientras tanto, el aumento en sus especialidades farmacéuticas ha sido del 9%, es decir, ha pasado de 195,6 millones de euros a 214 millones.
Además de la vacuna contra el coronavirus que la farmacéutica fabrica para Moderna (el antígeno en Granada y el proceso de envasado en la capital), las heparinas siguen siendo el motor de la compañía. El biosimilar de enoxaparina fue su medicamento más vendido con unos ingresos de 82,1 millones de euros lo que supone un aumento del 31% respecto al mismo periodo de 2021 en el que consiguió 62,7 millones. La nota negativa la pone el fármaco Hibor que ha perdido el 9,3% de las ventas, es decir, de 65,1 millones de euros ha pasado a 55,8 millones. Por otro lado, Neparvis, un tratamiento de Novartis del que Rovi tiene los derechos de comercialización desde 2016; y Volutsa, producto de Astellas que la firma madrileña vende en España, han tenido un crecimiento de un dígito.

En cuanto a términos de innovación y desarrollo, Rovi en los primeros seis meses del año ha invertido 10,4 millones de euros, es decir, un 12% menos respecto al mismo periodo de 2021 en el que dedicó 11,9 millones. Estos gastos en I+D están vinculados a la preparación del desarrollo de dos medicamentos (Letrozol y Risperidona), según indica la compañía en el informe financiero.
Por otro lado, la farmacéutica abonará un dividendo con cargo a los resultados del ejercicio de 2021 de 0,9556 euros por acción, lo que supone un incremento del 151%. Además, implica el reparto del 35% del beneficio neto consolidado del ejercicio de 2021, aproximadamente.
En relación a la previsiones para 2022, la farmacéutica espera una buena evolución del negocio. "Esperamos que los ingresos operativos se incrementen entre un 15 y 20%. No obstante, dadas las incertidumbres asociadas aún a la evolución de la pandemia, todavía no es posible evaluar, de forma precisa, el impacto que tendrá la pandemia en el total del ejercicio en curso", explica la compañía. "Rovi espera seguir creciendo por encima de la tasa de crecimiento del gasto farmacéutico en España en los cinco primeros meses de 2022, que ascendía al 6,9%, de acuerdo con las cifras publicadas por el Ministerio de Sanidad ", recalca.
Si se habla de las palancas de crecimiento, el acuerdo a largo plazo de Rovi con Moderna de diez años será una de las principales. El trato incluye una serie de inversiones que se espera que permita aumentar la capacidad de fabricación en las instalaciones de la farmacéutica en Madrid. Además de producir la vacuna contra el coronavirus, la plataforma podrá utilizarse también para dar servicio a futuras sueros candidatos de ARNm de Moderna.
En cuanto a los productos de elaboración propia, Europa autorizó la comercialización de Okedi, un tratamiento para la esquizofrenia en adultos. En abril de 2022, el medicamento se lanzó en Alemania, y en julio aterrizó en Reino Unido.