
Los científicos ingleses advierten de la importancia de no subestimar los efectos de dejar de tomar antidepresivos después de un largo tratamiento, puesto que los síntomas de abstinencia puede llegar a ser muy graves. En una revisión sobre los efectos de estos fármacos, los investigadores encontraron una relación directa entre la duración del tratamiento y la probabilidad y gravedad de los síntomas de abstinencia, según recoge The Independent.
El estudio se llevó a cabo mediante encuestas a varios pacientes que habían estado usando antidepresivos durante más de dos años tenían diez veces más probabilidades de sufrir los efectos de abstinencia, cinco veces más de que esos efectos fueran graves y hasta 18 veces más de probabilidad de que fueran duraderos, en comparación con los que habían seguido el tratamiento durante seis meses o menos. Los síntomas leves o nulos se dieron en aquellos que siguieron el tratamiento durante menos de cuatro semanas.
Efectos a largo plazo
En el caso de los usuarios que los tomaban a largo plazo, dos tercios informaron de que los síntomas eran moderados o graves, a los que muchos les duraron durante más de tres meses. En este tipo de perfiles, cuatro quintas partes de estos pacientes no pudieron dejar los antidepresivos a pesar de intentarlo.
El Informe Anual del Sistema de Salud, recoge que en los últimos diez años, el consumo diario de antidepresivos en España se ha disparado un 50%. Estos datos posiciona que España es el tercer país de la Unión Europa que más antidepresivos consume, tan solo por detrás de Portugal y Suecia. Dicho informe también recoge que el 34% de la población padece algún problema de salud mental.
Síntomas
La abstinencia de los antidepresivos suele darse si se interrumpe el tratamiento de forma abrupta y suelen prolongarse durante varias semanas, según recoge el portal Mayo Clinic. Entre estos síntomas destaca:
- Ansiedad.
- Insomnio.
- Dolor de cabeza.
- Cansancio y síntomas similares a los de la gripe.
- Irritabilidad.
- Náuseas.
- Reaparición de síntomas de depresión.
Desde la comunidad médica recuerdan que la abstinencia a los antidepresivos no es sinónimo de adicción a estos, ya que realmente no se dan cambios químicos dañinos en el cerebro. Una de las formas de evitar esto es reducir gradualmente la dosis del antidepresivo durante varias semanas, para permitir que el cuerpo se adapte a la ausencia del medicamento.
Relacionados
- Lo nunca visto: los genes de este alimento que todos tenemos en casa podrían apuntar a la creación de nuevos medicamentos
- La industria farmacéutica pide colaboración público-privada para acortar los plazos de aprobación de medicamentos
- Inquietud y preocupación en España por el posible efecto secundario del popular medicamento usado para bajar la fiebre
- Sanidad ordena la retirada de este conocido medicamento del mercado