
Las supervisoras de Enfermería de la Clínica Universidad de Navarra, Mercedes Gutiérrez y María Suárez de Lezo, han trabajado durante dos semanas en los hospitales Monkole y Binza, en Kinshasa (República Democrática del Congo), para reforzar la formación de matronas, acompañarlas en el manejo de las prácticas clínicas basadas en la evidencia y promover la implantación de las guías promovidas por la Organización Mundial de la Salud.
En profundidad
En la República Democrática del Congo cada año mueren más de 600 mujeres por complicaciones relacionadas con el embarazo o el parto, según datos de 'The Borgen Project' y UNICEF. La falta de personal sanitario formado y la escasez de medios básicos en los hospitales hacen "urgente" el refuerzo de los cuidados maternoinfantiles, especialmente en el momento del parto, denuncia la Clínica Universidad de Navarra.
"El embarazo y el parto siguen siendo momentos de alto riesgo para muchas mujeres congoleñas", afirma Gutiérrez. Así, afirma que allí no existen algunas de las condiciones básicas que consideramos esenciales en nuestros hospitales: no hay anestesia epidural, las complicaciones se derivan a otros centros, y las mujeres afrontan el parto prácticamente solas, sin apoyo familiar ni recursos sanitarios suficientes.
Sin embargo, las matronas congoleñas hacen un trabajo "admirable", son muy autónomas y sacan adelante partos complicados con muy pocos recursos, señala Suárez. No obstante, añade que es "fundamental" seguir trabajando en la humanización del cuidado, porque es un enfoque que tiene un impacto "muy positivo" en las mujeres, que agradecen mucho la cercanía y el acompañamiento.
En este sentido, Suárez explica que su labor ha sido ofrecer conocimientos y herramientas a las profesionales locales para que puedan liderar el cambio desde dentro.
Este proyecto se enmarca dentro de un convenio de colaboración firmado entre la Clínica Universidad de Navarra y el Institut Supérieur en Sciences Infirmières, de Kinshasa, junto con el Instituto para la Cultura y la Cooperación Canadiense.
Asimismo, el pasado noviembre, esta apuesta de la Dirección de Enfermería de la Clínica por contribuir a la formación de matronas africanas recibió el galardón 'Iniciativas Corresponsables' en los X Premios Enfermería en Desarrollo.
A tener en cuenta
Además de la formación de matronas, la Clínica Universidad de Navarra también colabora en otros proyectos como el programa 'Elikia', una iniciativa de la Fundación Amigos de Monkole dirigida a prevenir el cáncer de cuello de útero entre mujeres con escasos recursos, también en la República Democrática del Congo.
Este proyecto, activo desde 2017, busca implantar un modelo sostenible de cribado y tratamiento precoz que permita detectar y tratar lesiones en una sola consulta.
La alta prevalencia del virus del papiloma humano y las dificultades de acceso al sistema sanitario en estos países hacen urgente extender los programas de cribado. Desde su inicio, este programa ha beneficiado a más de 3.000 mujeres congoleñas.
Este año ha sido liderado por el especialista del Servicio de Microbiología de la Clínica, Gabriel Reina, que ha encabezado un equipo de 13 voluntarios entre profesionales sanitarios, profesores y estudiantes de la Universidad de Navarra.
En esta campaña se ha cribado a 505 mujeres, con una tasa de positividad del 29% en la detección del cáncer de cérvix, cifra que se eleva al 41% en mujeres con VIH.