
Una potente combinación de compuestos antipalúdicos añadidos a mosquiteros bloqueó la transmisión del parásito en mosquitos y, al mismo tiempo, eludió la resistencia a los insecticidas, según un nuevo estudio dirigido por investigadores de la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard (Estados Unidos).
En profundidad
Este hallazgo amplía considerablemente la comprensión de los objetivos farmacológicos en el desarrollo del parásito en la fase de mosquito y sienta las bases para una nueva forma más eficaz de prevenir la transmisión de la malaria. El estudio se publica en 'Nature'.
"El control de la malaria necesita urgentemente innovación", atestigua Flaminia Catteruccia, coautora del estudio, profesora de Inmunología y Enfermedades Infecciosas de la Cátedra Irene Heinz Given e investigadora del Instituto Médico Howard Hughes. "Este es un avance trascendental en el desarrollo de una nueva estrategia de control de la malaria dirigida a los mosquitos, que podría dar lugar a una nueva generación de mosquiteros antimaláricos eficaces".
Más detalles
La malaria es una de las principales enfermedades infecciosas mortales a nivel mundial, con 263 millones de casos y 597.000 muertes en 2023. Si bien a principios de siglo se lograron avances significativos en la prevención de la enfermedad, en la última década los casos y las muertes se han estancado, debido en parte a la resistencia generalizada de los mosquitos a los insecticidas. Los mosquiteros tratados con insecticidas, una de las herramientas más utilizadas para el control de la malaria, han perdido eficacia.
En este contexto, los investigadores realizaron una prueba pionera con 81 compuestos antiparasitarios, aplicándolos directamente a mosquitos Anopheles gambiae (impulsores clave de la enfermedad) para identificar cuáles eliminaban a los parásitos 'Plasmodium falciparum', causantes de más del 90% de los casos de malaria en humanos a nivel mundial.
Así, descubrieron que 22 de los compuestos inhibieron significativamente el desarrollo de 'P. falciparum' y, tras realizar más pruebas, identificaron dos compuestos extremadamente activos que eliminaban a los parásitos mediante la inhibición de diferentes sitios de la cadena de transporte de electrones mitocondrial, un objetivo de los compuestos antimaláricos.
Cuando los investigadores incorporaron estos compuestos en prototipos similares a mosquiteros, eliminaron el 100% de los parásitos en concentraciones muy bajas. Mantuvieron su actividad incluso después de un año y eliminaron eficazmente los parásitos incluso al aplicarlos a la hembra de Anopheles hasta cuatro días antes de la infección, lo que redujo significativamente la probabilidad de que el mosquito se volviera infeccioso.
"Esta nueva estrategia para el control de la malaria bloquea la transmisión del parásito a través de mosquitos sin matarlos ni inducir resistencia, lo que podría prolongar la vida útil de los mosquiteros", describe la autora principal, Alexandra Probst, estudiante de doctorado del programa de Ciencias Biológicas y Salud Pública.
La resistencia a los insecticidas ha dificultado los esfuerzos de control de mosquitos, especialmente en África. Por ello, una gran ventaja de esta estrategia es que se centra en eliminar el parásito en lugar del mosquito.