Las largas jornadas laborales, los compromisos familiares y la necesidad de conservar una estabilidad individual con el ritmo frenético de la vida cotidiana han provocado que la convivencia diaria con una pareja no sea una prioridad para millones de españoles y españolas.
Normal, claro está. De hecho, hay quienes buscan nuevas formas de vivir el amor sin que implique una renuncia total a su independencia. A pesar de que compartir el día a día con una pareja puede ser una gran fuente de estabilidad, hay quienes lo ven como un obstáculo a su bienestar personal.
En profundidad
De ahí que surjan conceptos como las parejas OWC (Only Weekends Couples). Un modelo que busca combinar lo mejor de estar soltero con las relaciones de pareja. De este modo, se restringe la pareja a los fines de semana, mientras que el resto de semana se deja para el resto de cosas: hobbies, quedar con amigos...
Como bien todos sabemos, este fenómeno no implica una separación emocional ni infidelidad, como muchos piensan en las redes sociales, sino una forma alternativa de mantener un vínculo afectivo cuya prioridad es la independencia y la calidad del tiempo compartido.
Beneficios
Entre sus ventajas, cabe destacar las siguientes:
- Conseguir un equilibrio entre independencia y relación.
- Fomentar el crecimiento personal.
- No renunciar a proyectos personales.
Ahora bien, también presenta dificultades para profundizar en la conexión emocional, desafíos en la comunicación, o una gran abanico de negatividad para gestionar los problemas cotidianos, que a menudo pueden pasar desapercibidos.
A tener en cuenta
Como es previsible, el perfil de personas que apuestan por este modelo son las que han tenido relaciones con anterioridad y no quieren renunciar a su espacio personal, que podría verse bastante comprometido en una convivencia diaria.