La menta, como bien todos sabemos, es una planta aromática que pertenece a la familia de las lamiáceas. Aunque crece en todo el mundo, es de la región mediterránea y ha sido aprovechada desde hace décadas tanto en la medicina alternativa como en la gastronomía debido a sus características y refrescante sabor.
Propiedades
Entre sus beneficios, cabe destacar los siguientes, según varios expertos:
- Ayuda a la digestión. Sus hojas contienen aceite esencial, cuyo compuesto principal es el mentol que tiene propiedades antisépticas y antibacterianas que alivian la indigestión y el malestar estomacal.
- Mejora los resfriados y el asma. La menta tiene propiedades antiinflamatorias, por lo que es un buen relajante y alivia la congestión y la irritación de la tos.
- Trata el dolor de cabeza. Su aroma fuerte y refrescante ayuda a aliviar los dolores de cabeza. Su olor reduce el estrés y produce un efecto relajante.
- Ayuda a perder peso. Estimula las enzimas digestivas, que ayudan a facilitar una mejor absorción de los nutrientes de los alimentos y esto genera un mejor metabolismo. Y un rápido metabolismo ayuda a perder peso.
- Mejora el poder del cerebro. Acelera la capacidad mental, incrementando el estado de alerta, la retención y las funciones cognitivas.
- Protección de la piel. Sirve para tratar el acné y las espinillas. Sus propiedades antiinflamatorias y antibacterianas mejoran el aspecto del rostro.
- Purifica el aire. Mejora la calidad del aire, ayudando a eliminar toxinas y a mantener el ambiente fresco.
A tener en cuenta
Pero esto no es lo más importante. Al parecer es una de las hierbas más populares y versátiles en nuestro país cuando se trata de repeler las plagas. Con su fuerte aroma a mentol, es muy efectiva para mantener alejados a ratones, cucarachas y mosquitos.
Precisamente los primeros, poseen un sentido del olfato muy desarrollado y tienden a evitar los olores penetrantes como el de la menta. De ahí que situar hojas frescas de menta o un par de gotas de su aceite esencial en áreas de entrada puede ser una forma natural y sencilla de proteger el domicilio.
