
Las hojas de las higueras han sido tradicionalmente empleadas en el terreno de la medicina ayurvédica debido a sus múltiples propiedades curativas. El fruto de la higuera, el higo, presenta también un potente valor nutricional por el que es reconocido, sin embargo, también las hojas han despertado gran interés para los científicos, según recoge Infobae.
En zonas del mediterráneo y Asia estas hojas se han empleado en infusiones y extractos, popularizándose en gran medida en los últimos años en la búsqueda de alternativas naturales para la salud. Una de las características más destacables es que el extracto ayuda a mejorar la sensibilidad a la insulina y a reducir los niveles de glucosa en sangre, por lo que es especialmente beneficioso para el tratamiento de la diabetes tipo 2.
Una taza de las hojas de higo infusionadas en ayunas o después de las comidas puede ser la forma ideal de controlar estos niveles de glucemia en sangre, aunque lo más recomendable es consultar previamente a su médico antes de incluirla en su dieta.
Más detalles
Más allá de sus efectos en la diabetes, las hojas de higuera presenta un gran potencial antioxidante debido a su alto índice en compuestos fenólicos y flavonoides, que ayudan a combatir el estrés oxidativo y a proteger a las células del daño causado por los radicales libres. Estas cualidades antioxidantes, así como sus altos niveles de fitonutrientes ayudan a reducir el riesgo de enfermedades crónicas como el cáncer, problemas del corazón o envejecimiento prematuro.
También presenta gran cantidad de propiedades antiinflamatorias que permiten aliviar los dolores articulares, musculares e, incluso, las molestias digestivas. En relación con esto último, se trata de una planta que favorece el tránsito intestinal y alivia el estreñimiento, además de otros trastornos digestivos leves.
Contraindicaciones
Gracias a su capacidad para reducir los niveles de triglicéridos y el colesterol "malo" mejoran la salud cardiovascular en general. Por último, se ha demostrado que tienen efectos antimicrobianos frente a bacterias u hongos, esto hace que sea un posible tratamiento para la desinfección de pequeñas heridas.
Si bien aunque los beneficios aparentemente son muchos, la realidad es que no se ha demostrado científicamente sus efectos reales. Además, en personas sensibles puede generar graves reacciones alérgicas o irritación, por lo que no se recomienda su uso sin la supervisión de un médico.