
Muchas personas se fijan en la apariencia del envase a la hora de elegir lácteos saludables. Ahora bien, no debería ser así: la composición es mucho más importante. De hecho, hay productos que esconden determinados aspectos que no aparecen reflejados en su etiqueta.
En profundidad
Uno de los errores más habituales es pensar que los yogures 0% grasa son la mejor opción del supermercado. Y es que, nada más lejos de la realidad, lo que se elimina en grasa -en muchas ocasiones- se compensa con azúcares añadidos, según el médico Manuel Viso, especialista en urgencias y hematología.
"¿Crees que los 0% son los mejores?, cuidado, porque muchos de estos yogures van cargados de azúcares", ha revelado en su cuenta de Instagram. Y hay que prestar especial atención también en los yogures griegos que numerosas marcas se han lanzado a elaborar en la actualidad.
Más detalles
Con la leche sucede algo muy parecido. Y es que un gran porcentaje de la sociedad española considera que la desnatada es la alternativa más saludable. Eso sí, lo cierto es que la entera conserva bastante mejor sus vitaminas naturales, como la A y la D.
Asimismo, la grasa láctea favorece la absorción de nutrientes y proporciona mayor sensación de saciedad, lo que es muy útil si pretendemos evitar el picoteo entre horas, sobre todo de cara al periodo veraniego que se encuentra a la vuelta de la esquina.
A tener en cuenta
El queso tampoco puede pasar desapercibido. A su juicio, "leche, cuajo y sal" es lo único que debería llevar un buen queso. Hay que evitar los ultraprocesados, como los quesos fundidos o los tranchetes, puesto que suelen incluir aceites vegetales, almidones y aditivos, muy alejados de la receta original.
"Si ahora se busca un queso saludable, hay que apostar por variedades frescas o cottage, que tienen menos grasa y sodio", ha concluido el especialista. La publicación, como era de esperar, se ha viralizado en la citada red social en cuestión de semanas, superando las miles de visualizaciones.