
Los huevos, como bien todos sabemos, cuentan con todos los nutrientes necesarios para el desarrollo de los más pequeños -y no tan pequeños- de la casa, por lo que se trata de un alimento muy completo. Tanto la clara como la yema contienen una parte sustancial de proteínas de alto valor biológico.
Aunque la Asociación Americana del Corazón recomienda limitar su ingesta semanal a tres unidades por su alto contenido en colesterol (200mg por huevo) y los responsables sanitarios transmiten esa idea a la población, hay estudios posteriores que han desmentido esa idea.
Propiedades
Entre sus beneficios, cabe destacar los siguientes, según el portal especializado 'Tua Saúde':
- Mantienen la salud mental. Son ricos en colina, una vitamina esencial que participa en la formación de la acetilcolina, un neurotransmisor importante para mantener el buen funcionamiento del cerebro.
- Ayudan a combatir la depresión. Protegen las células del sistema nervioso central, mejorando la producción de sustancias responsables del estado de ánimo y bienestar.
- Ayudan en la pérdida de peso. Gracias a su contenido de proteínas, ayudan a prolongar la sensación de saciedad, reduciendo el apetito a lo largo del día.
- Aumentan la masa muscular. Son ricos en proteínas, nutrientes que proporcionan energía al organismo.
- Reducen el colesterol LDL. Son ricos en luteína y zeaxantina, dos antioxidantes que combaten los radicales libres, evitando la oxidación de las células de grasa y disminuyendo los niveles de colesterol malo LDL.
- Mantienen la salud de la piel. Contienen buenas cantidades de selenio y zinc, minerales que mejoran la absorción del colágeno, manteniendo la piel firme e hidratada.
A tener en cuenta
Pero esto no es todo. Según una nueva investigación de la Universidad de Monash, publicada en la revista 'Nutrients', comer huevos de una a seis veces por semana está asociado con un menor riesgo de muerte en general y de muerte relacionada con enfermedades cardíacas en adultos mayores 'relativamente sanos'.
"Las investigaciones sugieren que son la fuente preferida de proteínas para todos los adultos mayores que podrían estar experimentando un deterioro físico y sensorial relacionado con la edad", ha concluido la autora Holly Wild. Y no es para menos.