Los frutos secos, como bien todos sabemos, se han hecho un hueco entre los alimentos más saludables para introducir en la vida cotidiana de millones de españoles y españolas. De todos ellos, las nueces destacan por encima del resto gracias a sus múltiples propiedades para la salud.
Origen
Al parecer, este alimento son las semillas que albergan el fruto maduro y seco del nogal (Junglans regia), árbol originario de la antigua Persia, según algunos autores, o de China y Japón, según otros expertos, desde donde fue llevado a Grecia, para extender más tarde su cultivo a Italia y a los demás países templados de Europa.
De hecho, existen datos que confirman su existencia desde el año 7.000 a.C. En la época romana, las nueces eran símbolos de unión matrimonial. Tanto es así que, llamada por los romanos bellota de Júpiter (Juglans regia), representaba al hijo de Júpiter, el dios predilecto del Olimpo en la mitología romana.
Propiedades
Entre sus numerosos aspectos positivos, cabe destacar los siguientes, según el portal especializado 'TuaSaúde':
- Evitan enfermedades neurodegenerativas. Son potentes antiinflamatorios y antioxidantes que ayudan a prevenir el daño oxidativo en las células cerebrales. Estos compuestos mejoran la comunicación y la función de las neuronas.
- Regulan el azúcar en la sangre. Son ricas en fibra y ácidos grasos insaturados, como el omega 3, que contribuyen a reducir los niveles de azúcar en sangre tanto en ayunas como después de las comidas.
- Ayudan a bajar de peso. Pese a que son altas en calorías, algunas investigaciones asocian el consumo de nueces con la reducción del peso y de la grasa corporal. Eso sí, siempre que se incluya una dieta equilibrada y saludable.
- Controlan la presión arterial. Son ricas en polifenoles y ácidos grasos insaturados, que poseen propiedades antiinflamatorias que mejoran la salud del endotelio.
- Mejoran el rendimiento muscular. Contienen polifenoles y ácidos grasos Omega-3, con propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la inflamación muscular provocada por el ejercicio físico.
- Previenen el envejecimiento. Sus antioxidantes ayudan a reducir los daños celulares causados por los radicales libres, previniendo el envejecimiento prematuro.
- Mejoran la función intestinal. Al ser ricas en fibras, polifenoles y ácidos grasos, actúan como alimento probiótico, puesto que estimula el crecimiento de bacterias beneficiosas para la salud intestinal, ayudando a regular la función de los intestinos.
A tener en cuenta
Ante este panorama, un gran porcentaje de personas se preguntan qué sucede en el corazón si comemos nueces todos los días. Pues bien, al ser ricas en ácidos grasos Omega-3, promueven la disminución del colesterol total y el colesterol 'malo', aumentando el colesterol 'bueno'. Además, protegen al organismo de contraer enfermedades cardiovasculares.
Por si fuera poco, los polifenoles de las nueces, principalmente el ácido elágico, contiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que ayudan a mejorar la función endotelial, actuando también como un protector cardiovascular. Pero esto no es todo.
Seguir una dieta saludable que incluya nueces puede contribuir a lo siguiente:
- Mejorar la salud de las arterias.
- Disminuir la inflamación relacionada con enfermedades cardíacas.
- Disminuir el riesgo de coágulos sanguíneos, que pueden causar ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
- Disminuir el riesgo de tener presión arterial alta.
- Disminuir el riesgo de muerte prematura debido a una enfermedad cardíaca.
- Reducir los niveles de colesterol no saludable, concretamente de los triglicéridos y las lipoproteínas de baja densidad.