El rambután, más conocido también como lichi y cuyo nombre científico es Nephelium lappaceum L., es una fruta tropical que aporta multitud de beneficios para la salud, como ayudar a prevenir el cáncer, reducir el colesterol sanguíneo, controlar la diabetes y combatir infecciones.
Origen
Al parecer, se trata de una fruta originaria del sudeste asiático tropical. De hecho, se considera que es nativa de Malasia, pero su cultivo se ha extendido con el paso de los años a diferentes partes de Asia, África, América Central y Oceanía.
De unos cinco centímetros de diámetro y 40 gramos de peso, el rambután tiene una forma ovalada o redonda, con una piel de color rojizo (en ocasiones puede ser naranja o amarillo) y cubierta de determinadas puntas o pelos ondulados y finos. Es más, el nombre de la fruta viene de la palabra malaya rambut, que significa pelo en referencia a su peludo exterior.
Propiedades
Entre sus beneficios, cabe destacar los siguientes:
- Aumenta el sistema inmunitario. Rico en vitamina C, que aumenta las defensas del organismo, protegiendo las gripes, resfriados e infecciones.
- Previene la oxidación de las células. La cáscara y los extractos de la pulpa poseen compuestos con potentes propiedades antioxidantes, los cuales combaten los radicales libres,
- Controla la diabetes. Los extractos de la cáscara y semilla del rambután tienen un efecto inhibitorio de la sustancia ?-glucosidasa, una enzima que forma parte del metabolismo de la glucosa, promoviendo la reducción de azúcar en sangre.
- Promueve la pérdida de peso. Puede favorecer la pérdida de peso, puesto que es rica en fibras que forman una sustancia gelatinosa en el intestino, aumentando el tiempo de digestión de los alimentos y absorción de los nutrientes.
- Reduce el colesterol. Este fruto, por sus propiedades antioxidantes, promueve la reducción de grasas en el organismo, disminuyendo el colesterol y los triglicéridos en sangre.
- Mejora la salud intestinal. Gracias a su contenido en fibras, el rambután puede contribuir a una digestión saludable.
Recomendaciones
Cuando es consumida en grandes cantidades, el rambután puede causar diarrea, gases o hinchazón abdominal por su alto contenido en fibra. Aunque la pulpa es segura, la semilla, al ser consumida cruda, tiene efectos narcóticos y analgésicos, causando somnolencia y, en casos más graves, el coma.
Para consumir esta fruta, se debe abrir rasgando la piel, o bien, cortando el medio y extrayendo el interior que no se aferra a la piel y luego retirar la semilla del centro con mucho cuidado. Al ser tan versátil, se puede usar en varias preparaciones: ensaladas, yogur, postres, batidos...