Esto es lo que hizo que una mujer francesa viviese hasta los 122 años, según recogió un demógrafo

Jeanne Calment es conocida por ser la persona que más años ha vivido de la historia, después de alcanzar los 122 años de edad y 164 días, nacida en 1875 y fallecida en 1997. Una de sus últimas conversaciones fue la que tuvo con el experto en demografía Jean-Marie Robine, como parte sus investigaciones sobre longevidad.

Si bien este investigador ha llegado a una conclusión clara, también asegura que "tenemos que tener en mente que buena parte de la longevidad de Calment se debe simplemente al azar, porque es algo excepcional. Si bien, llevar a cabo una serie de pautas a lo largo de su vida puede ayudar en gran medida.

Perteneciente a la clase alta

Así, los factores que influyeron en que esta mujer viviese tantos años fueron tres: un estilo de vida saludable, evitar el tabaquismo hasta una edad avanzada y tener una vida social plena. Robine explica que Jeanne nació y creció en una familia burguesa, lo que le permitió tener una formación educativa hasta que se casó, algo que pudo contribuir muy positivamente a su salud física y mental.

Además, nunca desarrolló trabajos que requiriesen de un gran esfuerzo, por lo que sus niveles de estrés a lo largo de su vida no fueron elevados. "Siempre tenía a alguien en casa que le ayudase", por lo que ni siquiera tenía que preocuparse por hacer la compra ni llevar a cabo otras tareas del hogar.

Fumadora en la tercera edad

Otro de los aspectos más determinantes fue el tabaquismo. Si bien esta mujer sí que fumaba, la realidad es que no lo podía hacer hasta los 20 años, es decir, una vez estuviese casada. "Por supuesto era algo prohibido e imposible para una mujer, especialmente de familia burguesa", explica este experto en demografía. Si bien lo probó en aquel momento, no fue hasta los 112 años que se convirtió en fumadora habitual, cuando ya se encontraba en una residencia de ancianos.

Su nivel económico le permitió disfrutar de gran cantidad de tiempo libre, por lo que llevó a cabo muchas de actividades de ocio con otras personas y viajando por diferentes puntos del país. "Ella estaba descubriendo un mundo fascinante que se abría ante ella entre finales del siglo XIX y comienzos del XX. Alcanzó los 122 años y 164 días gracias a una vida sana, tranquila y llena de actividades", indica este demógrafo.