Orinar es determinante para que nuestro cuerpo funcione adecuadamente. Y es que además de agua contiene toxinas que debemos ir eliminando para mantener el equilibrio del organismo. Aunque aguantarse las ganas de manera esporádica por una situación particular no tiene efectos negativos, hacer esto habitualmente sí puede alterar la función de la vejiga.
De hecho, la repercusiones a largo plazo pueden ir desde padecer infecciones urinarias de repetición hasta incontinencia urinaria o incapacidad de vaciar adecuadamente la vejiga, con la consiguiente necesidad incluso de usar sondas vesicales para vaciarla por completo.
Ventajas
Por lo general, tanto hombres como mujeres orinan sentados, ya sea por el día o durante la noche. Eso sí, hay un pequeño porcentaje del primer colectivo que lo hace de pie. Y es algo que, casi como cualquier cosa en esta vida, presenta ventajas y desventajas.
Con respecto a los aspectos positivos, orinar de pie es percibido por numerosos hombres como una opción más conveniente y rápida, especialmente en situaciones donde el tiempo es un factor determinante, como durante actividades al aire libre o en baños públicos.
Asimismo, orinar de pie reduce el contacto físico con inodoros, lo que puede ser beneficioso en términos de higiene, sobre todo en baños públicos. Como bien sabemos, esta postura reduce el riesgo de exposición a gérmenes y bacterias presentes en las superficies del baño.
Desventajas
La desventaja de orinar estando de pie es la posibilidad de que se produzca un vaciado incompleto de la vejiga, que puede provocar retención urinaria. De hecho, un estudio en 'Plos One' ha desvelado que los hombres que orinaban sentados tenían más probabilidades de tener volúmenes de orina residuales más bajos que los que estaban de pie.
Lo cual ha evidenciado un vaciado de la vejiga más completa, pudiendo ser realmente problemático para hombres mayores o aquellos con condiciones como el agrandamiento de próstata. También hay mayor riesgo de síntomas del tracto urinario inferior como la incontinencia urinaria y la nicturia.
A tener en cuenta
Con todo ello, conviene señalar que en España y México son más propensos a orinar de pie, mientras que en Alemania y Japón es más frecuente orinar sentado.