El romero es mayoritariamente conocido por su uso en la cocina española. Eso sí, es una planta con múltiples beneficios: desde atraer buenas energías hasta aromatizar espacios tanto interiores como exteriores. En la actualidad, su combinación con bicarbonato ha llamado la atención al ser un método natural para cuidar el cabello.
Sí, en especial para quienes buscan una solución casera para las canas. Por lo general, es perfecto para aquellos que tienen cabello oscuro, puesto que potencia la pigmentación de forma natural. A su vez, los resultados pueden no ser tan favorables para quienes tengan cabello rubio, por lo que se recomienda precaución.
En profundidad
Sorprendentemente, el bicarbonato es conocido por equilibrar el pH del cuero cabelludo, evitando lo máximo posible que el cabello pierda su color natural con el tiempo. Por su parte, el romero actúa como un potente antioxidante que retrasa todo el envejecimiento del cabello, gracias a sus ácidos cafeico y rosmarínico.
Por si esto fuera poco, estimula la actividad de los melanocitos, las células encargadas de producir pigmento, ayudando de manera considerable a mantener el cabello hidratado y sin grasa. Por todo ello, esta receta se ha vuelto una favorita entre quienes desean ocultar sus canas de forma discreta y sin recurrir a productos químicos.
Más detalles
Cabe destacar que es recomendable, antes de probarlo, consultar a un dermatólogo para asegurarnos de que no causará efectos adversos. Y es que, pese a que posee múltiples beneficios, es vital hacernos esta prueba previa para asegurarnos de que no cause irritación o alergias.
La mezcla es muy sencilla. Tan solo se necesitan los siguientes ingredientes: un litro de agua, varias ramas de romero fresco y tres cucharadas de bicarbonato. En primer lugar, hay que hervir el agua junto con el romero y el bicarbonato durante cinco minutos, removiendo para que se mezclen bien los ingredientes.
En segundo lugar, hay que dejar enfriar el preparado por completo. Por último, debemos aplicar la mezcla como un tinte, cubriendo desde las raíces hasta la puntos. Algunas personas, incluso, lo usan como champú natural, dejando reposar el líquido sobre el cabello durante media hora antes de enjuagar.