
La farmacéutica Blanca Acha Santamaría ha descrito que determinados cambios en la metilación del ADN podrían utilizarse como potenciales herramientas "menos invasivas y más accesibles" para detectar la enfermedad de Alzheimer a partir de una muestra de sangre. Este avance podría permitir una detección "más temprana y precisa" de esta dolencia neurodegenerativa que afecta, principalmente, a la memoria y otras funciones cognitivas.
Así lo recoge en su tesis doctoral, defendida en la Universidad Pública de Navarra (UPNA) y desarrollada en Navarrabiomed, centro de investigación biomédica del Ejecutivo Foral y la institución académica.
La metilación del ADN es un proceso biológico que actúa como un mecanismo de control sobre nuestros genes. En dicho proceso, se produce la unión de un pequeño grupo químico (un grupo metilo) a una parte específica del ADN, lo que puede activar o desactivar la expresión de genes y afectar así al funcionamiento normal de las células, explica la UPNA en una nota de prensa.
Blanca Acha realizó la identificación de determinados cambios en la metilación del ADN de pacientes con enfermedad de Alzheimer, comparado con controles sanos, por lo que el uso de biomarcadores de metilación del ADN en sangre periférica se postula como "una herramienta prometedora en la mejora de la precisión diagnóstica de esta dolencia como parte de un panel de biomarcadores periféricos", según la investigadora. Además, sus resultados subrayan la importancia de una investigación "desde la perspectiva de género" en la búsqueda de nuevas herramientas diagnósticas en la enfermedad de Alzheimer.
Asimismo, estos resultados "apoyan la posible implicación de la metilación del ADN en la patología de la enfermedad de Alzheimer", indica Blanca Acha, cuya tesis ha sido dirigida por Maite Mendioroz Iriarte e Idoia Blanco Luquin, investigadoras de la Unidad de Neuroepigenética de Navarrabiomed, y tutorizada por Ignacio Encío Martínez, profesor del Departamento de Ciencias de la Salud de la UPNA.