Barcelona
Grifols y Brookfield enterraron esta semana la carpeta de la posible opa del fondo sobre la farmacéutica tras meses de due diligence y conversaciones antes de ni siquiera presentarse. Y a tenor de las palabras de Nacho Abia, consejero delegado de la firma de hemoderivados, la opa que nunca llegó a ser no tendrá una alternativa en forma de gran operación corporativa. "No hay plan B ni plan C, volvemos al business as usual con foco en el negocio", aseguró.
El primer ejecutivo de la organización catalana asegura que la prioridad de la empresa pasa por incrementar ahora sus resultados. "Vamos camino de cerrar un año excelente, crecemos a doble dígito y el ebitda sube entre un 20% y un 25%", recordó. En los últimos doce meses, la firma ha generado un ebitda de 1.700 millones de euros. Es la principal palanca para reducir el endeudamiento, explicó.
De este modo, Abia quiere despejar la posibilidad de una gran operación en el futuro inmediato. No habrá una gran venta y trabaja "para que no sea necesaria una ampliación de capital", dijo.
Sobre las desinversiones, esperadas por el mercado, el dirigente señala que cuando habla de portfolio management se refiere a gestionar con rigor la amalgama de proyectos y sociedades de la compañía debido a que se trata de centenares de iniciativas que acarrean su consecuente inversión. "Vamos a ver las que siguen a delante y las que se deciden parar", señala. Garantizó, eso sí, que no habrá "ninguna desinversión de volumen relevante". Los analistas habían especulado con la venta de la filial de diagnóstico, especialmente durante 2022.
Abia también asegura que la dirección trabaja "para que la ampliación de capital no sea necesaria". "En el futuro pueden darse muchas circunstancias, pero me consta que el accionariado actual está confortable tal y como está y mientras los números sean los que son no necesitamos la ampliación de capital", añade. "No está en la agenda", remata.
Tampoco, sostiene, el llamado plan B está en la mente de la familia Grífols, el accionista de referencia. "No me consta que lo haya ni que la familia lo busque". En declaraciones a EFE, fuentes de la saga catalana dijeron el miércoles que están "muy satisfechos y contentos del apoyo recibido de los actuales accionistas" y que "no apoyarán ninguna otra operación".
A juicio de la familia, el fabricante de hemoderivados "atesora un gran valor y continuará desarrollando su expansión, como viene haciendo desde hace más de 115 años". Abia también defiende haber recibido el apoyo de numerosos inversores a pesar del castigo que viene sufriendo la acción durante los últimos meses.
Así, el foco de Grifols está ahora en seguir generando buenos resultados financieros, que crecen en el último año a doble dígito. No espera que la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca merme su rentabilidad con una subida de los costes del plasma: "No creemos que tenga efecto. Es una industria necesaria. En la época del covid se generó el problema de que se cerró la frontera, pero de lo que se habla ahora es manejar la inmigración ilegal". Los centros de la cotizada en el sur de Estados Unidos se nutren en parte de donantes mexicanos que cruzan la frontera. "No son ilegales, hay inmigrantes que van a trabajar a Estados Unidos y aprovechan para donar", diferenció.
La mejora del ebitda es la fuente principal con la que reducir el endeudamiento, que ha pasado de 6,7 veces deuda/ebitda en abril a 5,1 veces al cierre del tercer trimestre. "No diré que no me preocupa, pero la deuda más bien me ocupa", compara. De los 9.200 millones de mochila, en 2025 se afronta la refinanciación de 1.300 millones. "El año que viene está bajo control", sostuvo.
Así, Grifols ya ha iniciado conversaciones para refinanciar 350 millones de un bono que vence en febrero. También está en conversaciones con la banca para renovar una línea de revolving por valor de 950 millones de euros. La deuda ha sido uno de los principales campos de trabajo de Abia desde su llegada. Además, a este capítulo se destinaron los 1.600 millones obtenidos con la venta del 20% de Shanghai Raas, culminada el pasado mes de junio.
La fecha clave en el calendario de pagos será 2027, cuando le esperan más de 2.000 millones en vencimientos, tras la última refinanciación. "Toca generar buenos resultados y flujo de caja; faltan tres años para ello".
El Capital Markets Day "entre febrero y marzo"
Las conversaciones con Brookfield provocaron que Grifols decidiese suspender el Capital Markets Day, previsto para el mes de octubre. Una vez guardada la carpeta de la opa, la cotizada convocará a analistas e inversores una vez se hayan publicado los resultados de todo el ejercicio 2024. "Será a finales de febrero o principios de marzo", emplazó Abia. La firma quiere explicar su plan estratégico y los números de los próximos años con las cifras del año fiscal ya siendo una realidad.