
Los hospitales, los profesionales sanitarios y los procedimientos quirúrgicos han cambiado. Si hay que operar un tumor cerebral ya no se abre la cabeza al paciente sino que se utiliza la medicina mínimamente invasiva y esta es la clave de hacía dónde va esta profesión. Además, han aparecido distintas tecnologías como la ZAP-X, una innovadora máquina que elimina los tumores cerebrales de forma rápida y sin necesidad de una intervención quirúrgica. Solo hay una en España y se encuentra en el Hospital Viamed Santa Elena (Madrid).
Un grupo de neurocirujanos españoles en una cena propusieron traer a España una nueva tecnología para el tratamiento de pacientes con enfermedades del sistema nervioso central. "Este país siempre ha estado en la cola de la tecnología médica. Neurocirujanos y jefes de servicio de distintos sitios de la península dijimos: vamos a dar un paso adelante y la vamos a traer", dice el presidente de la Sociedad Española de Neurocirugía y neurocirujano del Hospital Viamed Santa Elena, el doctor Kita Sallabanda Díaz.
El grupo de profesionales propusieron esta idea al Gobierno para que formase parte del catálogo de la sanidad pública, pero la respuesta fue negativa. "Decían que teníamos suficiente con lo que teníamos", indica. Ante este hecho, buscaron financiación privada y el fondo Mercurius la compró. Además, necesitaban el apoyo de un grupo hospitalario y Viamed aceptó. Cabe mencionar que ZAP-X tiene un coste de cerca de cuatro millones de dólares.
En el momento en que esta máquina aterrizó en España solo había tres en Europa. En concreto, dos en Alemania y una en Suiza. Hoy en día, hay siete, uniéndose a la lista España e Italia, entre otros. Además, "Inglaterra está luchando por tener una máquina y se prevé que suceda en 2025", afirma el neurocirujano.
Respecto a España, se está intentando poner una en Barcelona y otra en Sevilla. "Nosotros ayudamos en la formación y divulgación de esta tecnología", detalla.
ZAP-X es un sistema innovador de radiocirugía estereotáctica precisa y no invasiva, dedicada a tratar tumores o lesiones en el cerebro, cabeza o cuello. "Esta máquina trata en 360 grados en dos ejes: vertical y oblicuo. Además, tiene casi 1.600 puntos de entrada y eso lo que hace es no dañar el cerebro", explica el doctor.
ZAP-X es como un "auto-búnker". Posee una serie de ventajas en comparación con otras tecnologías. Por un lado, no utiliza cobalto, un material tóxico; sino fotones. "El cobalto cuando finaliza su tiempo de trabajo tienes que meterlo en un sitio protegido porque emite radiación. Esta máquina no lo utiliza y desde un punto de vista medioambiental es muy positivo. Es enchufarlo a la electricidad y ya esta", dice Kita Sallabanda Díaz.
Por otro lado, no necesita un búnker. Todos los equipos tecnológicos -a excepción del TAC- requieren estar debajo de la tierra. Sin embargo, esta máquina no lo necesita porque tiene muchos elementos de inteligencia artificial. El paciente solo tiene que meterse dentro.

El equipo ZAP-X puede tratar todo tipo de metástasis, según el neurocirujano. De hecho, "hemos tratado hasta 21 metástasis en un paciente", afirma. También trata el dolor oncológico, tumores benignos y malignos, glioblastomas recurrentes y el resto de patologías del sistema nervioso central de cuello hacia arriba.
Además, esta tecnología se utiliza para tratar la neuralgia del trigémino. Es una afección de dolor crónico que afecta el nervio trigémino. Este es responsable de la sensación en la cara, incluida la boca. "Se trata de uno de los dolores más fuertes que se conoce en el mundo junto con el del cólico renal", dice el doctor. La Sociedad Española de Neurología estima que esta patología afecta a más de 35.000 personas en España. Cabe mencionar que el tratamiento estándar es el fentanilo, una "droga que hoy en día está provocando muchos fallecimientos en países como Estados Unidos", apunta Sallabanda Díaz.
Ya han pasado por la máquina del hospital alrededor de 170 personas. El proceso para el paciente es sencillo. "Primero tiene que venir a consulta, tanto de oncología radioterapéutica como neurocirugía, para que identifiquemos la patología y qué opciones de tratamiento hay. Cuando el paciente acepta la terapia hacemos un TAC y una resonancia de planificación y al día siguiente o a los días lo hacemos", explica el médico. "El paciente no se queda ingresado en ningún momento", añade. Cabe mencionar que el 70% de las personas solo han necesitado una sesión y el resto entre tres y cinco.
Investigación y avances
Hoy en día, se están realizando investigaciones para ampliar el uso de esta tecnología a otras patologías del sistema nervioso central. "Se está estudiando para el neurinoma del acústico, meningioma, malformaciones vasculares, cordomas, sarcomas y astrocitoma, además de muchas otras", explica Sallabanda Díaz. "No hay una limitación en las patologías que podemos tratar", agrega.
Por otro lado, se han diseñado otros equipos para curar las enfermedades de otras zonas del cuerpo humano. Un ejemplo es el equipo CyberKnife, diseñado por el neurocirujano estadounidense John R. Adler para la radiocirugía robótica y la radioterapia corporal estereotáctica. Cabe mencionar que este se encuentra en España. También Lars Leksell creó el Gamma Knife. Este es un aparato de radioterapia. Utiliza imágenes avanzadas y programas de computación para tratar pequeñas áreas blanco en la cabeza y en el cerebro. El tratamiento administra dosis intensas de radiación en el área blanco mientras evita el tejido circundante.
