
El grupo hospitalario Imed logró esquivar la caída de negocio que podía suponer el final de la pandemia gracias a un fuerte incremento de los ingresos procedentes del sector asegurador. El grupo nacido en Benidorm y que cuenta con centros sanitarios y hospitales fundamentalmente en Comunidad Valenciana y Murcia logró aumentar ligeramente sus ingresos globales un 0,3% en 2022, hasta 172,18 millones de euros.
De esa cifra, más de la mitad procedió de compañías aseguradoras con las que mantienen convenios para sus hospitales y centros, en concreto 100,08 millones de euros, un 22% más. Un incremento que compensó la caída del dinero procedente de la atención a clientes particulares, que con 48,7 millones de euros se redujo en 18 millones respecto a un 2021 marcado por la pandemia.
Y eso a pesar de la mayor presencia de los pacientes de otros países tras el confinamiento, ya que concentrar su actividad en zonas turísticas y de segunda residencia, se duplicó: 16,85 millones correspondieron a ingresos procedentes de otros países.
El grupo sanitario privado actualmente cuenta con 5 hospitales generales (Benidorm, Elche, Valencia, Gandía y Alcoy), 4 policlínicas (Teulada, Torrevieja, Gandía y Alcoy), un centro de radioterapia oncológica (Murcia), un centro de diagnóstico por imagen de alta tecnología (Alicante) y un centro de asistencia sanitaria para el paciente extranjero (La Cala de Villajoyosa).
Además, el grupo mantuvo estable los ingresos procedentes del sistema público de salud, algo más de 19 millones, y de las mutuas. Según recoge en su informe de gestión, "durante el ejercicio 2021, el crecimiento de la actividad, del resultado de explotación y de la cifra de negocios consolidada estuvieron influenciadas por la actividad atípica no recurrente provocada por la pandemia". Frente a ella en 2022 "la prestación de estos servidos de carácter extraordinario se ha reducido exponencialmente por la remisión de los efectos de la pandemia" por lo que la actividad del grupo se ha normalizado.
Menos beneficio
Eso también supuso una caída del beneficio neto, que pasó de 27,3 millones en 2021 a 16 millones el año pasado. A ello se suma las inversiones que mantiene el grupo para continuar con su expansión, aunque varias de ellas acumulan retrasos.
Así su informe preveía para el segundo trimestre de 2023 la apertura del segundo proyecto en la Región de Murcia: el Hospital Imed Virgen de la Fuensanta con40 habitaciones individuales, 8 boxes de UCI y 40 consultas externas, que sin embargo sigue sin abrir. También para el tercer trimestre de 2023 se preveía la apertura del hospital Imed Colón en la ciudad de Valencia, ubicado en el centro de la capital y que dispondrá delas principales especialidades médicas, 5 quirófanos, urgencias 24h con 5 boxes, 41 camas individuales y 46 consultas externas en el antiguo edificio de Iberdrola en la calle Isabel La Católica, que sin embargo no ha avanzado. Según recogía la propia empresa, "las sinergias que generará este nuevo centro con el actual Imed Valencia redundarán en mejores resultados en salud y un sistema sanitario más sostenible".
Para finales de 2023 también prevé la finalización de las obras de ampliación del Hospital Imed Levante en Benidorm, su auténtica joya de la corona que ganó más de 12 millones en 2022. Una actuación que permitirá incrementar en casi 16.000 metros cuadrados la superficie del actual hospital, incluyendo 4 nuevos quirófanos y 92 consultas, "convirtiéndolo en el hospital privado más grande de la provincia de Alicante".
Además, el grupo hospitalario Imed tiene previsto destinar hasta 48 millones de euros de inversión a su nuevo centro en la capital de Alicante. Una cifra en la que se incluye la compra del suelo, la construcción del centro que prevé tener finalizado en 2024 y su equipamiento.