
La Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) ha aprobado una modificación presupuestaria de cerca de 500.000 euros destinada a conceder subvenciones directas a las tres denominaciones de origen vitivinícolas de la provincia: Cariñena, Campo de Borja y Calatayud, consolidando su presencia en los mercados y su papel estratégico en el medio rural.
Las ayudas estarán destinadas, entre otras finalidades, a la promoción, difusión y valorización de los vinos de estas tres zonas, con el propósito de reforzar su posicionamiento tanto en el mercado nacional como internacional. La iniciativa busca también contribuir a la visibilidad y puesta en valor de estos productos como parte esencial del patrimonio agroalimentario zaragozano.
Esta actuación se enmarca en el compromiso de la institución provincial con un sector considerado estratégico para el desarrollo del medio rural. No solo por su peso económico, sino también por su función vertebradora del territorio y su capacidad para generar empleo y fijar población en el entorno rural, explican desde la DPZ.
Desde la Diputación han señalado que esta línea de subvenciones pretende consolidar el apoyo a las Denominaciones de Origen en su labor de promoción y proyección exterior, al tiempo que se reconoce su relevancia como seña de identidad local y motor de desarrollo sostenible en las comarcas vitivinícolas.
La medida, que fortalece la colaboración institucional con los productores y consejos reguladores, aspira a garantizar la competitividad y continuidad de un sector que representa una parte fundamental de la economía zaragozana.