Food Delivery Brands, la empresa propietaria de Telepizza y que gestionaba en España y varios países latinoamericanos la marca Pizza Hut, acelera su salida de Latinoamérica y se desprende de sus 100 locales en Chile. La empresa asegura que "pese a haber hecho todos los esfuerzos posibles para sostener la operación de la compañía, se ha tomado la difícil decisión de proceder al cierre de todas las operaciones bajo las marcas Telepizza y Pizza Hut en Chile, junto con solicitar la liquidación de la empresa ante los tribunales competentes".
En un comunicado publicado en Chile la empresa reconoce que "el negocio de Food Delivery Brands en Chile se ha visto afectado por las consecuencias de un complejo entorno económico, competitivo y financiero, lo que ha obligado a tomar la decisión de concentrarse en sus operaciones en Europa". Asimismo, la empresa justifica la solicitud de quiebra con el fin de proteger a sus empleados.
"La decisión de solicitar la liquidación voluntaria de la compañía es el camino más responsable para preservar, en la mayor medida posible, los derechos de los trabajadores y del resto de partes afectadas por este proceso", explica. Después de haber recortado 170 puntos de venta franquiciados por Pollo Campero en Guatemala y El Salvador y tras ejecutar el 1 de enero del año pasado el traspaso de 560 locales de Pizza Hut que tenía en régimen de masterfranquicia en Latinoamérica, tal y como estaba pactado con Yum!, el grupo puso a la venta el negocio que aún le queda en la región, otros 600 locales en Chile, Colombia, Ecuador y México.
Tras el cierre de Chile, tan solo queda por lo tanto pendiente la venta de Colombia, Ecuador México. Telepizza, que llegó a alcanzar en 2022 una red a nivel mundial de 2.368 establecimientos -el año pasado se redujo ya a 2.180- tiene ahora así apenas 1.600 locales operativos. Aunque no se conocen las cifras, el grupo tenía previsto alcanzar unas ventas en el ejercicio de 2024, incluidas las de restaurantes propios y franquiciados, de 721 millones, la mitad prácticamente respecto a los 1.377 millones con lo que cerró 2023. Los ingresos propios de la compañía se situarán en 2024 alrededor de los 300 millones, lo que supone igualmente un tercio menos.
