
Las almazaras españolas se están quedando sin aceite. El stock de enlace hasta que empiece a entrar producción tras el inicio de la nueva campaña está en mínimos históricos y, según advierte Gonzalo Guillén, director general de Acesur, la compañía propietaria de marcas como La Española o Coosur, apenas queda existencias "para un mes o mes y medio".
Las previsiones de cosecha son, en cualquier caso, optimistas y se estima que la producción podría alcanzar 1,3 millones de toneladas, lo que repercutirá directamente en los precios. "Aunque es complicado que pueda llegar a los niveles de los años 2020 y 2021, habrá una bajada en los próximos meses y el precio podría tocar suelo en abril o mayo del año que viene", ha asegurado Guillén. El director general de Acesur ha evitado pronosticar donde estará ese suelo, aunque en el sector se estima que podría llegar hasta el entorno de los 5 euros.
"El mercado del aceite de oliva ha sufrido un inflación galopante debido a una cuestión de climatología y a que ha habido dos malas cosechas seguidas. Ahora, y más con la llegada de la lluvia, es posible que pueda haber más bajadas a partir de noviembre o diciembre". Más allá de España, todos los países, "a excepción de Italia y Marruecos" están recuperando niveles de producción. "A nivel global podemos volver a 3,1 o 3,2 millones de toneladas este año", ha sentenciado.
Caída del consumo
El director general de Acesur ha explicado que, como consecuencia de la fuerte subida de los precios, el consumo a nivel mundial cayó el año pasado un 25%, entre un 18% y un 19% en el caso de su compañía, pero ha insistido también en que la situación se está revertiendo. "Ahora estamos creciendo un 20%", ha dicho. En España, según Guillén, el consumo sigue cayendo y se está produciendo un trasvase del consumidor desde el aceite de oliva a productos de semillas, como el girasol.
El gigante del aceite andaluz, que estaba facturando alrededor de 700 millones anuales, pasó a 1.100 millones debido a la subida de los precios el año pasado y prevé que este año se puedan superar los 1.200 millones. "En volumen hemos recuperado todo lo que perdimos", ha asegurado. Respecto su participación en Deoleo, ha insistido en que "la compañía ha mejorado mucho y nos congratulamos de ello", pero ha declinado valorar una posible venta. "Estamos tranquilos, cómodos y seguiremos ahí".