Barcelona
Cataluña se prepara para un nuevo proceso de reindustrialización tras el culebrón de Nissan Zona Franca. Danone cerrará su planta de Parets del Vallès (Barcelona) y la instalación de Aldaia (Valencia) asumirá el 90% de su carga de trabajo. En plena negociación con la plantilla y autoridades para bajar la persiana a la factoría, la multinacional ha contratado a Lee Hetch Harrison (LHH) para encontrar un comprador para el centro catalán.
Fuentes cercanas al procedimiento explican a elEconomista.es que el equipo de reindustrialización de LHH ya trabaja en la elaboración del dossier y la búsqueda de interesados para el centro. De hecho, la misma firma ya participó en el proceso de reindustrialización de la fábrica de Salas (Asturias) el pasado año 2022.
La firma, más conocida por su papel en la gestión de personal que por este tipo de servicios, todavía está en una fase inicial de sus trabajos.
Las mismas voces señalan que entre los potenciales interesados podrían estar dos candidatos, que en los últimos meses ya engrasaron su relación con Danone con las últimas desinversiones del grupo. Se trata del grupo americano Schreiber Foods, interproveedor de Mercadona, y que hace una década ya compro las plantas de la firma gala en Canarias y Portugal, cuando acometió una ronda de desinversiones en Europa.
El segundo nombre sobre la mesa es el de la láctea neerlandesa Royal A-ware, que el año pasado se hizo con la fábrica de Salas para elaborar queso mozzarella con el compromiso de mantener los mismos niveles de empleo y dar prioridad en las contrataciones a los antiguos empleados. El centro de Parets del Vallès, eso sí, es más grande que su homólogo asturiano, por lo que esa actividad no sería a priori replicable.
Sin embargo, fuentes de Danone niegan que estos dos nombres estén sobre la mesa.
El procedimiento se encuentra en una fase muy incipiente por lo que está lejos de ser el momento de presentar ofertas en firme y otros actores podrían acercarse. La voluntad de las partes es destinar el espacio a un uso industrial y aparcar las opciones logísticas. Pero lo cierto es que Danone acometió una inversión de 22,7 millones en la planta, tanto en digitalización como en la modernización y ampliación de sus líneas de producción, especialmente para crecer en productos vegetales.
El cierre de Parets
En paralelo a la búsqueda de inversores, la cotizada francesa avanza en las negociaciones con los sindicatos para llegar a un acuerdo por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado para toda la plantilla. Aunque todavía sin cifras, se exploran tres vías para los trabajadores: las indemnizaciones por el despido, prejubilaciones y el traslado a la planta que el grupo tiene en la localidad de Aldaia y que asumirá la mayor parte de la carga de trabajo de Parets del Vallès. La firma concentrará su actividad en Valencia y en el centro de Tres Cantos (Madrid).
En la instalación catalana trabajan 157 personas y la compañía de alimentación justificó su cierre por la caída de las ventas de los productos allí fabricados. Los sindicatos han convocado una manifestación el próximo 12 de febrero en Barcelona y está previsto que se reúnan con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, en las próximas semanas.