
No solo han subido los costes energéticos o la materia prima. Las cadenas de supermercados aumentaron el año pasado casi un 6% también sus gastos de personal. Todo en plena escalada de los salarios como consecuencia de la inflación y a pesar de que los resultados crecen por debajo, a un ritmo del 4,7% y de que su margen neto se ha reducido desde el 2,1% al 1,9% de media.
Teniendo en cuenta que también ha habido incrementos de plantilla, Makro es la empresa que más ha elevado sus gastos de personal, un 24,41% en 2022, según las últimas cuentas disponibles, hasta un total de 147,8 millones de euros. Mercadona es la segunda compañía que más los ha aumentado, un 8,78% en concreto, y la que tiene además un mayor coste por esta partida, de un total de 3.678 millones de euros en el último ejercicio.
Además de la fuerte subida de los salarios en plena ola inflacionista, ligados hasta ahora al IPC, hay que tener en cuenta, no obstante, que la plantilla de la cadena de supermercados valenciana se elevó en 2022 en 2.000 trabajadores, hasta alcanzar una plantilla total de 96.000 personas.
El pasado mes de diciembre, Mercadona llegó a un nuevo acuerdo con los sindicatos por el que, se fija un límite máximo anual del 2,5% de subida salarial. Pero eso no quiere decir que si la inflación es más alta los trabajadores vayan a perder poder adquistivo. Y es que si el IPC supera ese porcentaje, el incremento del sueldo podría llegar hasta el 6%. Eso sí, siempre y cuando se cumplan los objetivos de beneficio de la empresa que preside Juan Roig, algo que de momento se está consiguiendo.
Para Mercadona, que reparte además un porcentaje de las ganancias entre sus trabajadores, se trata de "una medida acorde con el modelo de creación de riqueza y reparto de beneficios compartidos que viene aplicando desde hace años la compañía".
Sueldo base
La compañía ya aplica un sueldo mínimo de entrada de 1.507 euros brutos al mes, lo que no solo supone un 20% más que el salario mínimo interprofesional, sino que se sitúa además muy por encima del resto del sector de la distribución en España. Y a esa cifras se suman además, entre otros, los complementos propios de la política retributiva de la compañía, que suponen incrementos de hasta un 11% anual, y que puede llegar a representar un 60% más sobre el salario mínimo interprofesional.
Entre las empresas con mayores incrementos de los gastos de personal al margen de Makro o Mercadona destacan también Lidl, con un aumento del 6,31% en 2022, hasta un total de 438 millones de euros; Consum, con una subida del 4,67%, hasta 471 millones y Froiz, con un 3,15%, hasta 1331 millones de euros.
La única empresa, de hecho, donde los gastos de personal se han reducido, aunque de forma mínima, ha sido Carrefour, que tuvo el año pasado un coste de personal de 797 millones de euros. En Dia se mantuvieron de forma similar, en 705 millones, aunque hay que tener en cuenta que esta cadena ha llevado a cabo un agresivo plan de cierre y venta de tiendas que no eran rentables.
Convenio de Anged
Al margen de Mercadona, Anged, la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución, que agrupa a compañías como Carrefour, Alcampo, Eroski, Costco o El Corte Inglés, entre otras, pactó también en marzo una renovación del convenio colectivo de las grandes superficies que incluye una subida salarial del 17% en un plazo de cuatro años y que los sindicatos calificaron ya en su día de "histórica".
Se trata del mayor convenio de España, teniendo en cuenta que afecta a unos 260.000 trabajadores, y fija un sueldo mínimo de casi 18.000 euros brutos anuales para el año 2026, frente a los 15.029 euros del año pasado.
La subida pactada ha sido de un 4,5% en 2023, un porcentaje similar en 2024, del 3% en 2025 y del 2% en 2026. No obstante, hay además un componente variable no consolidable del 3% en los últimos tres años del convenio, a un 1% en cada uno de ellos. Pese a las acusaciones desde una parte del Gobierno, especialmente durante la última legislatura, de una posible especulación con el precio de los alimentos, el sector de la distribución denuncia que es el principal afectado por la subida de los costes y que está sufriendo una pérdida de rentabilidad.
Caída de márgenes
De hecho, ee acuerdo con un informe elaborado por McKinsey para la patronal europea del comercio, Eurocommerce, que ha analizado las cuentas de las doce mayores empresas europeas del sector, el margen bruto se ha reducido del 27% al 24,5% entre 2019 y 2022, lo que supone una caída de 2,5 puntos porcentuales.
En el sector se confía, a pesar de todo, de que la inflación se modere a lo largo de este año, lo que permitiría frenar también la escalada de los costes salariales. Y eso a pesar de que las empresas están sufriendo también un incremento de las cotizaciones sociales.