
Otra subida de costes amenaza con aumentar aún más la inflación de los alimentos. El nuevo reglamento de envases que negocian las instituciones de la Unión Europea (UE) y que se votará el 24 de octubre en la comisión de Agricultura costará como mínimo 23.000 millones de euros a los sectores de la hostelería y a la distribución alimentaria, según han denunciado hoy once asociaciones.
En el caso de los supermercados, el coste será de entre 50.000 y 150.000 euros por tienda por la inversión en instalaciones de máquinas para la recogida de envases.
Si se tiene en cuenta que en España hay 24.000 puntos de venta el coste se situaría entre los 1.200 y los 3.600 millones de euros para la distribución. Pero a esas cifra hay que apuntar entre los 15.000 y los 20.000 millones de euros para los bares y restaurantes en conjunto.
El borrador establece tres objetivos clave: la prevención de los residuos de envases, el impulso de la reutilización y el rellenado, y el objetivo en 2030 de que todos los envases sean reciclables. El Reglamento Europeo de Envases y Residuos de Envases pretende, en concreto, reducir los residuos de envases en un 15% de aquí a 2040, por persona y por Estado miembro en comparación con las cifras de 2018. Habrá diferentes porcentajes para los distintos sectores y se establecen objetivos intermedios hasta esa fecha (reducción del 5% respecto a 2018 para 2030 y del 10% para 2035). La consecuencia será, sin embargo, una subida de los costes que acabará repercutiendo en los precios que paga el consumidor.
Firmantes
Los sectores agroalimentarios españoles firmantes del manifiesto, que incluyen once organizaciones de agricultores, ganaderos, productores, envasadores, industrias de la distribución y restauración, así como recicladores, urgen ahora a la Presidencia Española en la Unión Europea a preservar la seguridad jurídica y alimentaria y piden que las medidas "salvaguarden la seguridad y calidad de los productos".
En este sentido, a la hora de establecer objetivos de reutilización de envases alimentarios, las organizaciones piden una revisión profunda de las distintas funcionalidades de los envases y alimentos, contemplando las exenciones necesarias para preservar la seguridad alimentaria, minimizar los riesgos para la salud y reducir el desperdicio de alimentos. También señalan que este cambio en el modelo de producción tendría una serie de implicaciones económicas y logísticas derivando además por ejemplo en un aumento de la huella de carbono e hídrica al compararlo con el sistema actual de recogida y reciclaje, ya que las nuevas obligaciones de reutilización supondrían la implementación de -entre otros- nuevos sistemas de lavado, refrigeración y transporte.
Entre los firmantes están las patronales de distribución Anged, Aces y Asedas y de la hostelería, Marcas de Restauración, así como varias organizaciones sectoriales.
Emilio Oviedo, director para Iberia de la Alianza para los Cartones para Alimentos y Bebidas por el Medio Ambiente (ACE) ha resaltado hoy que "hasta la fecha ya se han invertido aproximadamente 200 millones de euros para aumentar la capacidad de reciclaje de envases de cartón para bebidas en la UE y se planea invertir otros 120 millones de euros para 2027, lo que lo convierten al español en unos de los sistemas de reciclaje y recogida más eficientes del mundo". En su opinión, "cualquier modificación del modelo actual conlleva implicaciones logísticas que pueden tener como consecuencia un aumento de la huella ecológica de nuestra producción".
María Martínez-Herrera, directora de Sostenibilidad de Asedas, apunta, por su parte, que "las implicaciones de los envases reutilizable son enormes y tienen un impacto en todo el sector agroalimentario español, desde el sector primario al sector de la distribución". En este sentido, mantiene que "no se puede modificar el uso de los envases, sin un estudio de impacto".