
Tanto los lácteos de consumo habitual, caso de los batidos o el yogur, como aquellos de consumo ocasional (postres) han reducido su contenido en azúcares añadidos en un 19% y un 8%, frente a los objetivos del 10% y el 5%, respectivamente, según un datos de la Federación Nacional de Industrias Lácteas (Fenil)
Desde modo, aseguran desde Fenil, "la industria láctea española ha cumplido los compromisos adquiridos en el Plan de colaboración para la mejora de la composición de alimentos y bebidas 2017-20, promovido por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), dependiente del Ministerio de Consumo".
Para la patronal láctea, la evaluación final de los acuerdos de reducción del contenido en nutrientes seleccionados constata que todas las subcategorías de productos lácteos han reducido su contenido mediano en azúcares añadidos por encima de los objetivos marcados.
En el caso de los lácteos de consumo habitual, la reducción media ha sido del 19%, frente a un 10% del objetivo, mientras que en los de consumo ocasional, se ha reducido un 8%, cuando el objetivo era del 5%.
En Fenil destacan que las empresas españolas elaboradoras de lácteos han mejorado significativamente la composición nutricional de sus productos, reduciendo el contenido de azúcar añadido de 13 diferentes categorías de productos lácteos en más de 300 referencias (varios tipos de yogures, batidos y postres lácteos), siendo el sector lácteo el que más categorías comprometió públicamente, tal y como aparece recogido en el BOE (número 54 de 4 marzo de 2019).
En palabras de Luis Calabozo, director general Fenil, "el sector lácteo está firmemente comprometido con su vocación de generar un impacto positivo en la salud de todas las personas".
"Por ello", añade, "todas las grandes, pequeñas y medianas empresas que conforman el sector llevan años realizando enormes esfuerzos para mejorar la composición nutricional de sus productos y su adecuación a las necesidades de todos los consumidores, incrementando la cantidad de categorías existentes sin azúcares añadidos, bajos en grasa o sal".
En Fenil subrayan que "teniendo presente que los alimentos esenciales como la fruta y la leche contienen azúcares naturalmente presentes, como fructosa y lactosa, respectivamente, la contribución de la leche y los lácteos en la ingesta de azúcar añadido es baja".
En la patronal láctea precisan que "según el estudio Anibes de la Fundación Española de Nutrición, las categorías incluidas en el plan contribuyen de media a un 4% de la ingesta energética diaria, y sin embargo aportan proteínas de alto valor biológico, ácidos grasos esenciales y más del 60% de la ingesta diaria recomendada de calcio en la dieta española".
Mejorar la dieta
El Plan de colaboración para la mejora de la composición de los alimentos 2017-20 es una línea de acción impulsada desde la agencia del Ministerio de Consumo para mejorar la calidad nutricional de la dieta de los españoles.
"La Federación Nacional de Industrias Lácteas ha tenido un papel relevante en esta iniciativa, pues además de su adhesión al plan y los esfuerzos en investigación, desarrollo e innovación de todos los socios, ha impulsado con fuerza los compromisos adquiridos y ha mostrado un cumplimiento que va más allá de los objetivos fijados", explican desde la entidad.
En Fenil concluyen diciendo que "este plan para la mejora de la composición de alimentos y bebidas ha sido fruto de la exitosa colaboración público-privada llevada cabo por todos los actores implicados en el desarrollo y evaluación de esta iniciativa, un modelo de colaboración que supone un hito a nivel europeo".