Las bodegas extremeñas que elaboran cava esperan una campaña de Navidad muy positiva

Extremadura tiene 2.000 hectáreas de las 37.000 que hay en España destinadas a la producción de la uva destinada a elaborar el cava, aunque es una pequeña parte de la producción, el cava extremeño está viviendo uno de sus momentos más dulces.

La pandemia y las restricciones sanitarias afectaron muy negativamente a la comercialización de cava, pero este año se prevé "con un mayor optimismo" frente a los dos anteriores, según ha destacado Marcelino Diaz, de Bodegas Díaz.

Las Bodegas que elaboran cava tienen en la campaña de Navidad su periodo más fuerte de ventas de todo el año, por lo que este año se vive con más "esperanza" porque hay más "movimiento" en la economía y en las calles, después de finalizar la crisis del COVID-19, según Díaz.

"Extremadura no se quedará sin cava", en Almendralejo (Badajoz), la ciudad del cava extremeño, se producen 6 millones de botellas, pero como bien afirma Marcelino Diaz, en "la región no hay una cultura de tomar cava, y en la mayoría de las ocasiones queda relegado al postre, el lugar menos indicado para disfrutar de un buen cava", por lo que el mercado extremeño apenas se consume y los productos acaban "en exportación".

El método de elaboración es el tradicional, buscando la segunda fermentación en la botella, pero la diferencia de los suelos y el clima, con respecto a las otras zonas productoras de cava, hacen que los extremeños destaquen por su suavidad, untuosidad y menor acidez, destaca Marcelino, por lo que hay un gran interés por conocer este cava tanto en España como fuera de las fronteras.