
Siempre que se acerca el verano, se entra en una carrera contrarreloj para tratar de perder esos kilos que consideramos tener de más. Para llegar a tiempo a la conocida como operación bikini, existen seis alimentos naturales: agua con limón, avena, tomate, algo picante, té verde y piña.
La delgadez es el canon estético de esta sociedad, y por ello, se tiende a recurrir a dietas exprés y productos mágicos que prometen eliminar kilos en un tiempo récord y sin esfuerzo. Sin embargo, esto suele ir acompañado de productos de refuerzo cuya calidad, eficacia y seguridad están en entredicho. Por ello, ante la duda, es preferible no consumirlos.
Asimismo, según una encuesta de ekilu-una aplicación para cuidarse desde casa- en 2021, el 95% de las dietas restrictivas se abandona o falla, y el 54% de los españoles no es constante a la hora de llevar un estilo de vida saludable. Las principales excusas para no cuidarse eran la falta de organización y planificación (27%), la falta de tiempo (25%) y la falta de motivación (20%).
Los expertos advierten de que este tipo de pérdida de kilos es temporal, pues suele ir acompañada del conocido como efecto rebote, donde se recuperan los kilos perdidos e, incluso, en muchas ocasiones, se ganan más kilos.
No es tarde para un cuerpo 10
Como ya se ha mencionado no existen los productos milagrosos sin pagar las consecuencias a largo plazo. No hay necesidad de tener que pasar hambre para poder lucir un cuerpo de 10 este verano en la piscina o en la playa. A veces es suficiente con llevar una vida más sana y cambiar los hábitos de vida.
De este modo, y teniendo en cuenta la encuesta ya mencionada de 2021, un 33% de los españoles ha asegurado que necesita ayuda para cambiar sus hábitos por unos más saludables. De esta primera cifra, un 23% han declarado que necesita ayuda para tener una rutina de ejercicio físico más constante; un 18% para tener una mejor salud mental y reducir los niveles de estrés; un 16% para descansar mejor y un 10% para ser más responsable y sostenible en su consumo.
Por ello, siguiendo el dicho "nunca es tarde si la dicha es buena", el verano solo acaba de empezar, por lo que todavía se está a tiempo de conseguir el cuerpo que se desea lograr, sin necesidad de tener que pasar hambre, privarse de determinados alimentos o ponerse a hacer ejercicio durante horas. Por ello, ofrecemos seis productos naturales que se pueden encontrar en cualquier supermercado, que son asequibles y que forman parte una buena dieta equilibrada y variada.
Los productos
Agua con limón en ayunas: En la simpleza de un vaso de agua con unas gotas de limón residen multitud de beneficios como, mejorar la digestión, neutralizar síntomas como las náuseas o la acidez de estómago, es antiinflamatorio, alivia el dolor dental y la gingivitis. Los cítricos son ricos en vitaminas y antioxidantes. Además, el limón destaca por sus propiedades antisépticas, astringentes y antibacte- rianas. El agua con limón, según el doctor David Jockers, "contiene ácido cítrico, que ayuda a limpiar y prevenir los depósitos de calcio que se acumulan en el agua."
Avena: Los copos de avena son el desayuno de las modelos, ¿cómo no va a ser bueno? En tortitas, galletas, bizcocho, gachas, y de cualquier forma que te imagines. La avena es una cereal muy completo y equilibrado. Aporta fibra, magnesio, hierro y vitamina B1 entre muchos otros. Una ración de 30 gramos solo aporta 110 calorías. Gracias a todo esto es un alimento muy saciante, lo que hace que se reduzca la ingesta de alimentos, y por lo tanto, favorece a la reducción de peso. Además, reduce el colesterol y los niveles de azúcar en sangre.
Tomate: En toda dieta que se precie siempre debe haber verduras, y qué mejor que el tomate, uno de los alimentos más usados. Este verano introdúcelo en una ensalada con orégano, en gazpacho, en salmorejo, asados, y de 1.000 formas más. ¿Por qué es tan efectivo? La fórmula es simple: tiene poca grasa, es saciante, diurético y desintoxicante. La suma de todo esto ayuda a la pérdida de peso. Del mismo modo, tiene otros beneficios como prevenir enfermedades del corazón, retrasar el envejecimiento corporal y ayudar a prevenir el cáncer de próstata, digestivo y pulmón.
Té verde: Esta infusión está considerada como la bebida de la eterna juventud debido a sus innumerables beneficios: reducir el riesgo de padecer cáncer, retrasar la vejez, fortalecer los huesos, mejorar la memoria y reducir el estrés. Diversos estudios han demostrado que el té verde es efectivo a la hora de adelgazar, porque acelera el metabolismo y favorece que la quema de grasas sea más rápida y efectiva. Así, como afirma el Instituto Médico Europeo de la Obesidad, "el té verde reduce nuestra capacidad natural de absorción de grasas".
Piña: Esta fruta, junto al melón y la sandía, son de las más refrescantes para el verano. Además de la hidratación (por su alto contenido en agua) aporta potasio y fibra, lo que crea una especia de capa de gel que ralentiza el proceso de la digestión. Esto hace que parezca que estamos saciados y que pase más tiempo hasta que se vuelva a comer. Según explica Times of India, "la piña contiene una enzima llamada bromelina que ayuda a metabolizar las proteínas. Dichas proteínas, al mismo tiempo, nos ayudarán a reducir la grasa abdominal".
Algo picante: introducir el picante en tu dieta no ayudará directamente a la pérdida de grasa, pero si indirectamente. Según la doctora Mar Mira, una de las fundadoras de Clínica Mira+Cueto, "al aumentar nuestra temperatura corporal gastamos energía y, por ende, calorías". Teniendo en cuenta esto, el picante es una especie de quema grasas natural, además de saciante. El picante se puede incluir en nuestra dieta fácilmente, por ejemplo, a la hora de aliñar las comidas es mejor hacerlo con un par de gotas de tabasco, ya que supondrá un ahorro diario de 72 calorías.