
Aunque no había alcanzado los niveles de este año, la inflación cerró el 2021 con un incremento de los precios del 6,5%. El coste de la energía y las materias primas ya andaba al alza desde el tercer trimestre y la industria ya sufrió el aumento del gasto. Con 10 fábricas repartidas por España, Nestlé fue una de las compañías que vio cómo se estrechaban sus márgenes y rebajó sus ganancias desde los 134 millones de euros a los 116 millones.
Según las cuentas anuales publicadas en el Registro Mercantil, Nestlé España saldó el ejercicio con un descenso del 13% del beneficio. La caída se produjo a pesar de haber incrementado la facturación, que subió desde los 2.217 millones hasta los 2.312. La cifra incluye tanto las ventas netas como los servicios prestados a terceros o los ingresos complementarios, explican desde la compañía a elEconomista.es.
El grupo; que en España comercializa marcas como los chocolates Nestlé, Nescafé, Nespresso, Viladrau o Purina; lamenta el contexto inflacionario actual, tanto en la energía como el precio de las materias primas y los embalajes. Sumado a las dificultades para repercutir las subidas al consumidor final hacen que la empresa dirigida en el país por Jordi Llach sea "moderadamente optimista".
De hecho, en mercados como el Reino Unido ya redujo la capacidad de sus envases sin rebajar el precio de los productos para hacer frente a la escalada de los costes, algo conocido como reduflación.
Nestlé no solamente vende productos en España. El país es uno de sus primeros centros de producción del continente. Tiene 10 fábricas repartidas por la Península Ibérica (4 en Cataluña, 2 en Asturias, 2 en Extremadura, 1 en Galicia y 1 en Cantabria), que fueron el motor de un crecimiento de las exportaciones tanto en valor (+5,7%) como en volumen (+8%).
Nestlé logró incrementar las ventas un 4,3% con la recuperación de la hostelería
Pero más allá del ascenso del gasto, el segundo año de pandemia se tradujo en un incremento de las ventas del 4,3% para Nestlé. El consumo en los supermercados cayó frente al 2020, cuando el cierre de la hostelería y el acopio durante la primera oleada del coronavirus llevó al sector a ingresos récord.
Sin embargo, la organización suiza exprimió la reapertura de la hostelería y, a pesar de que las restricciones se mantuvieron durante buena parte del año, la facturación ya roza los niveles de 2019. Además, el e-commerce creció un 11% frente al año 2020.
Por categorías, el café se benefició del buen funcionamiento de Nescafé Dolce Gusto y el café soluble Nescafé. Negocios como Purina, los productos veganos, Nestlé Health y las aguas crecieron a doble dígito. Otra cosa, de nuevo, fueron los márgenes, impactados por la subida de costes.