
Llegar a casa del trabajo sin energías y tener que ponerse a cocinar es probablemente una tortura. Evidentemente, las hay peores, pero aun así duele. O estar en el trabajo, tener hambre y no poder comer nada sano, solo ese triste sándwich compuesto por ingredientes desconocidos e imposibles de pronunciar. Para situaciones así, Rachel Drori creó Daily Harvest, un servicio de comida a domicilio por 90 dólares a la semana. La peculiaridad reside en que se trata de recetas preelaboradas a base de frutas y verduras de origen sostenible. Lo que empezó con unos sencillos batidos para ella y amigos y familiares, se ha convertido en todo un imperio. En 2020, ingresó 250 millones de dólares y un año después alcanzó el estatus de unicornio, con una valoración de 1.100 millones de dólares.
Fundada en 2015, Daily Harvest nació en la cocina de Drori, quien empezó a preparse batidos y a congelarlos como una solución para comer sano en el trabajo. De ahí saltó a una cocina comercial en Queens, donde mezclaba ingredientes comprados en el Trader Joe's más cercano para venderlos. Los encargados de hacerlo no eran otros que sus sobrinos, a quienes pagaba 20 dólares por noche para distribuirlos por Manhattan. En dos meses y con 25.000 dólares de su propio bolsillo, los pedidos quintuplicaron las compras de amigos y familiares. Fue entonces cuando Drori decidió dejar su trabajo como ejecutiva de marketing en la web Gilt Groupe y empezó a buscar financiación externa.
En esencia, el negocio de Daily Harvest se basa en la mezcla y envasado de frutas y verduras orgánicas de 400 explotaciones agrícolas repartidas por todo EEUU. Los proveedores recogen las cosechas y las congelan 24 horas después. A continuación, las envían a las instalaciones de Daily Harvest, de donde salen las recetas preelaboradas que se transforman en un plato de comida. Al estar congelados, los alimentos duran más tiempo y son más fáciles de transportar que los ingredientes frescos que ofrecen otros servicios de suscripción. Hay recetas de todo tipo, desde smoothies a boles, pasando por panes planos, sopas y platos para preparar en la sartén o el horno.
El objetivo de la startup es reimaginar la comida como algo que puede nutrir tanto a la humanidad como al planeta, asegura su CEO y fundadora a Forbes. Por un lado, busca hacer más fácil y accesible el consumo de frutas y verduras de origen sostenible. Por otro, contribuye al cuidado del planeta ayudando a los proveedores que lo necesiten en su transición hacia la agricultura ecológica. Se trata de un proceso que puede durar hasta tres años, periodo durante el cual Daily Harvest les proporciona una ayuda económica por adelantado.
En 2018, Daily Harvest recaudó cerca de 50 millones de dólares a través de tres rondas de financiación. Desde entonces, ha recaudado otros 130 millones de dólares, de los cuales, 100 millones proceden de una ronda de serie D liderada por Lightspeed Venture Partners y Lone Pine Capital, del multimillonario Stephen Mandel. En total, la startup cuenta con 24 inversores, entre los que se encuentran varias estrellas del baloncesto, como Carmelo Anthony, la tenista Serena Williams o la actriz Gwyneth Paltrow.
El impulso definitivo vino de la mano de la pandemia, dada la necesidad de espaciar las visitas al supermercado y el nuevo interés por la salud, señala Drori. En ese momento, la CEO de Daily Harvest optó por duplicar su inventario, lo que permitió a la startup contar con los ingredientes necesarios para seguir preparando y enviando sus recetas congeladas.
En la actualidad, Drori posee una participación estimada del 35% en Daily Harvest y su patrimonio neto asciende a 350 millones de dólares. Esta cifra la sitúa como la octava mujer más rica de EEUU, según el listado anual elaborado por Forbes.
De cara al futuro, los planes de Daily Harvest pasan por desarrollar una tecnología que les permita personalizar los pedidos en función de las alergias y preferencias alimentarias de los clientes. Asimismo, ha abierto una tienda física, The Tasting Room, en Chicago.