Los acontecimientos que se están sucediendo en Podemos en las últimas semanas se asemejan cada vez más a un drama crepuscular. Los resultados electorales, malos el 28 de abril y desastrosos el 26 de mayo, han ocasionado un nuevo tumulto interno en el partido, uno que amenaza incluso al mando omnímodo de Pablo Iglesias. Sin embargo, ante las exigencias de rendición de cuentas de los suyos, los que ha hecho el secretario general ha sido ofrecerles un sacrificio: Pablo Echenique.
A última hora del martes se filtró que el aragonés sería apartado de la secretaría general de Podemos durante la ejecutiva de hoy. Aunque desde el partido argumentan que este paso se debe a que Echenique será el responsable de coordinar y negociar pactos postelectorales. Pero a nadie se le escapa que, con este movimiento, dejará de ser la mano del rey Iglesias.
Llega 'el Rastas'
Su sustituto será un representante del ala monterista: Alberto Rodríguez, el diputado chicharrero que en su aterrizaje al Congreso fue conocido como el Rastas, ya se imaginarán por qué. Con todo, a pesar de que su peinado llamara la atención de sus señorías en un no tan lejano 2016, no son pocos los que han caído rendidos a su carácter moderado y tranquilo - incluyendo residentes en escaños populares - , aunque se enciende con facilidad cuando se trata Coalición Canaria, su enemigo natural. Su misión ahora será llevar esa paz que le caracteriza a la jaula de grillos morada.
