El presidente del PP, Pablo Casado, ha señalado este sábado en Murcia, en un encuentro que ha mantenido con periodistas tras su reunión con los regantes, que las negociaciones para formar gobierno en Andalucía "se tienen que hacer de forma discreta". "Lo queremos es un pacto de 47 escaños con Ciudadanos y una vez que alcancemos ese acuerdo, veremos si hay otras formaciones políticas que quieren facilitar la investidura con su abstención o consideran que las líneas marcadas en ese acuerdo son positivas para Andalucía".
"Lo importante es que lo andaluces nos han dado un mandato, el de propiciar un cambio de Gobierno, prácticamente un cambio de régimen después de 40 años de estructura clientelar y de inmobilismo del Gobierno socialista", ha apuntado el líder de los 'populares'.
Así, ha subrayado, "no podemos caer en la decepción que supuso el cambio en el País Vasco de Patxi López con apoyo del Partido Popular o eso que vendía Pascual Maragall del tripartito supuestamente no nacionalista. En este caso, la alternancia debe ser no de un mero Gobierno, ni de forma instrumental para que todo siga igual, sino un cambio de política de forma radical en Andalucía".
Ruega a Sánchez que aplique un nuevo 155 en Cataluña
Casado ha rogado este sábado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que aplique el artículo 155 de la Constitución en Cataluña porque, con los disturbios de los últimos días, esta comunidad se ha convertido en "un campo de batalla para la 'kale borroka'" y su política se ha "batasunizado".
El presidente del PP ha recalcado que esta comunidad "se le ha ido de las manos al Gobierno" de Sánchez y que ya ni siquiera la Generalitat "controla" a los Comités de Defensa de la República (CDR) a los que ha venido alentando el propio presidente Quim Torra.
"Les decían que apretaran y han apretado demasiado", ha denunciado haciendo referencia a los enfrentamientos con los Mossos y los cortes de carreteras que están protagonizando miembros de estos comités y de la organización juvenil Arran.
Tras mencionar otros episodios de violencia o intimidación que se han registrado en las últimas semanas en las calles catalanas, el presidente del PP ha alertado de que lo que está pasando allí es "un desastre" que no se puede "tolerar".