La reforma de los delitos sexuales y el cambio en la tipificación en el Código Penal están atascados en cómo demostrar, en caso de juicio, que no hubo consentimiento expreso por parte de la víctima. Aunque la ministra de Justicia, Dolores Delgado, ha asegurado este lunes que la cuestión está "muy avanzada", sí ha admitido que hay un "problema de prueba".
Delgado ha sido preguntada durante los desayunos informativos de Europa Press por los trabajos de la sección penal de la Comisión General de Codificación del Ministerio de Justicia, órgano sobre el que recayó el estudio de la tipificación de los delitos sexuales tras la polémica sentencia que condenó a los cinco miembros de La Manada por un delito de abuso sexual y no por agresión -o violación.
Sin dar detalles del contenido, Delgado ha anunciado que la propuesta se está "ultimando", aunque aún hay plazo para tenerla concluida hasta mediados de noviembre. La complejidad viene de "cómo articular los elementos probatorios a valorar por los operadores jurídicos y fiscales" para la acusación, ha reconocido la ministra.
"Vamos a ir a un consentimiento expreso", ha aseverado Delgado: "Sí tiene que ser sí", ha dicho en continuación con el discurso viene ofreciendo desde que la vicepresidenta Calvo anunciara en julio que se consideraría agresión sexual si no había un 'sí' explícito.
Delgado también ha hecho hincapié en los esfuerzos para mejorar la formación en perspectiva de género de los operadores jurídicos para dar cumplimiento al Pacto de Estado contra la Violencia de Género acordado en el Congreso.