La polémica por la colocación o la retirada de lazos amarillos en espacios públicos de Cataluña no amaina. La entidad constitucionalista Impulso Ciudadano presentó ayer una denuncia ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) contra el consejero de Interior catalán, Miquel Buch.
La querella también se extiende a los Mossos d'Esquadra y su motivación es la "discriminación ideológica" hacia los ciudadanos que fueron identificados por la policía autonómica tras retirar lazos amarillos y otra simbología independentista de la vía pública.
Por su lado, el presidente de la Generalitat, Joaquim Torra, reclamó ayer al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, que tome medidas disciplinarias contra el guardia civil que fue identificado por los Mossos retirando lazos o contra los agentes de la Policía Nacional que presuntamente insultaron a diputados de ERC, por un lado, y agredieron al fotoperiodista Jordi Borràs, por otro.
Ante esta situación, el Ministerio del Interior estudia convocar la Junta de Seguridad de Cataluña para abordar la colocación y retirada de lazos amarillos y símbolos independentistas de las calles.