
A falta de integraciones, como reclama la candidatura de Soraya Sáenz de Santamaría, la primera fusión del proceso de primarias en el PP ha llegado, aunque esta vez de la mano del equipo de Dolores Cospedal quien, según relató el entorno de Pablo Casado, ya se ha fusionado con su grupo de campaña y desde hace días trabaja con los casadistas en una estrategia de conjunto para ganar el Congreso de los días 20 y 21 de julio en Madrid.
A estas alturas de la contienda política, los afines a Casado creen que las cuentas que la exvicepresidenta se hace con el número de compromisarios podrían estar equivocadas. Para empezar, y en su opinión, Andalucía está más dividida de lo que dicen los de Santamaría. Estaría partida prácticamente a la mitad. Además, observa la candidatura de Casado, el voto de los delegados guarda bastante coherencia con el de los inscritos y electores en la primera vuelta. Por eso -señala el vicesecretario del PP- el cálculo a favor se aproxima al 63 por ciento de los compromisarios.
El equipo de Casado apunta a que Santamaría está ofreciendo el mismo cargo a varios compromisarios
Este martes, en un concurrido acto celebrado en el Parque del Retiro, al que acudió con el respaldo de María San Gil, Ángel Garrido (su gente dice que el presidente de la Comunidad de Madrid y el vicesecretario de Comunicación juegan ahora en la misma liga), numerosos dirigentes de la región, y también un nutrido grupo de opositores venezolanos al régimen de Maduro, como el exalcalde de Caracas Antonio Ledezma; su esposa Mizzy Caprile; el coordinador internacional de Voluntad Popular -el partido de López-, Lester Toledo; y Leopoldo López Gil (padre el opositor venezolano Leopoldo López), entre otros, Pablo Casado pidió a su adversaria a la Presidencia del PP que no ofreciera cargos a cambio del voto de compromisarios. Hasta el punto, desveló su equipo, de que "se promete un mismo cargo a varias personas", cuando de lo que se trata es de agrandar el proyecto, de valorar políticas de contenido y de ampliar el espectro de raíz política con principios transversales, indican. La misma candidatura lamenta que a estas personas, a las que los soyaristas "les ofrecen cargos", se les asegure que si Casado llega a la Presidencia, entonces prescindirá de esos compromisarios.
El diputado palentino adelantó ayer que, aunque en la primera vuelta de primarias no quiso ni compromisos ni adhesiones, como sí ocurrió en otras candidaturas -especialmente en la de Santamaría, que desde el primer día obtuvo el respaldo de ministros y secretarios provinciales como José Manuel Moreno Bonilla-, en la recta final de campaña todo será distinto.
Está previsto que asociaciones, líderes autonómicos y miembros del partido hagan público el apoyo a la candidatura del joven político de aquí al final de campaña. Mientras, con las espadas en alto, sin posibilidad de integrar candidaturas, y con las reticencias del COC para celebrar un debate, los de Santamaría mantienen que suman apoyos en las provincias que ganó Cospedal. Reprochan a Casado que divida entre señoras (la exvicepresidenta y la secretaria) para encontrar hueco, y Alfonso Alonso llama oportunista al contrincante por reprobar la Operación Diálogo. Sin paz.