Con ETA disuelta, aún quedan flecos que zanjar. Uno de ellos, el de los presos. Desde el final anunciado y escenificado el 3 de mayo, los contactos entre los gobiernos central y vasco sobre política penitenciaria no se han intensificado. Sin embargo, desde Instituciones Penitenciarias aseguran que Interior pidió entre febrero y marzo información sobre los encarcelados de la banda para actualizar su base de datos y poder responder a una pregunta parlamentaria en este sentido. ¿Ha protegido el Estado a 'Josu Ternera'?
La Secretaría General de Instituciones Penitenciaria, que depende de ese Ministerio, ha emitido un comunicado en el que rechaza la relación de estos correos con la disolución de ETA y un posible acercamiento de presos etarras. En este sentido, califica de "trabajo cotidiano" la solicitud de información por parte de la Administración Penitenciaria, de acuerdo a la "exigente responsabilidad de tener una base de datos actualizada y dar una precisa información a la fuerza parlamentaria solicitante de la misma".
Según Prisiones, "las peticiones de información se dirigieron a todos los directores de los centros penitenciarios y no solo a los directores de los centros en los que hay presos de ETA clasificados en segundo grado o padecen enfermedades graves".
"Las dos comunicaciones internas no fueron hechos extraordinarios, ya que peticiones de estas características, ya sea para actualizar datos sobre reclusos o para responder a preguntas parlamentarias, se vienen realizando desde hace años como un procedimiento más de la Administración Penitenciaria", argumenta Prisiones.
En la línea con lo defendido en estas últimas semanas por el Gobierno, Instituciones Penitenciarias asegura que la política antiterrorista "sigue siendo hoy la misma que ayer y que la de mañana, ya que ha sido uno de los pilares que ha conseguido la derrota de ETA, cuya asunción le ha conducido a su desaparición".
No solo sobre presos de ETA
Interior sostiene que estas peticiones de información a los directores de los centros penitenciarios no solo se realizan sobre presos pertenecientes a ETA, sino también sobre internos de corte yihadista así como sobre reclusos integrantes en organizaciones de crimen organizado. En definitiva, sobre los reclusos clasificados dentro del Fichero de Internos de Especial Seguimiento (FIES).
El Ministerio del Interior recuerda finalmente que los crímenes de ETA se seguirán investigando, los terroristas con causas pendientes seguirán siendo detenidos, los delitos se seguirán juzgando y las condenas se seguirán cumpliendo. "No va a haber impunidad ni los terroristas van a conseguir nada ahora, igual que tampoco lo consiguieron cuando dejaron de matar", destaca.
Sin acercamiento, de momento
Iñigo Urkullu inistenen pedir a Mariano Rajoy el acercamiento de los presos pero de momento y desde la disolución de ETA, no ha habido más conexión que la que se propuso tras el acto de escenificación del final de la banda.
El portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, señaló este miércoles en RNE que "el lehendakari, siempre que ha tenido contactos con el presidente del Gobierno para hablar del futuro del autogobierno y del marco general político, no para cuestiones puntuales que arrojara la vida política, siempre ha puesto sobre la mesa esta cuestión".
Como propuesta del Gobierno vasco, en boca de Erkoreka, "dentro de lo que es el fin ordenado de la violencia, un retoque de la política penitenciaria" contribuiría "a calmar los ánimos y a consolidar la paz y la convivencia de cara al futuro".
Pero parece que el acercamiento en este sentido está parado. "No me consta que desde que se produjo la desaparición formal de ETA que tuvo lugar hace un par de semanas, se hayan intensificado las conversaciones a ese respecto. Pero la posición del Gobierno Vasco la conocen perfectamente en Madrid", dijo en la entrevista.