La alerta sobre riesgo de atentado en Barcelona emitida por primera vez en mayo de 2017 por EEUU y enviada a los Mossos d'Esquadra estaba entre la documentación que iba a ser destruida el pasado 26 de octubre y que la Policía Nacional decomisó antes de que fuera incinerada.
Tras publicarse la "nota" venida de EEUU, el entonces conseller de Interior, Joaquim Forn, y el ex major del cuerpo, Josep Lluis Trapero salieron al paso de las informaciones con negaciones, alegando la "baja credibilidad" de la alerta y esgrimiendo acusaciones de campaña de desprestigio contra los mossos.
Según publica El Periódico, quien desveló el aviso, entre la documentación que iba a ser quemada el plena vorágine independentista -un día antes de que el Parlament votara la declaración de independencia y el Gobierno aplicara el 155- figura el original en inglés de la alerta y un informe interno elaborado por la policía catalana sobre esta nota.
Los Mossos d'Esquadra han evitado este lunes hacer ningún comentario sobre el intento de destrucción de esta nota de alerta, que la Policía Nacional ha comunicado a la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela, quien les ordenó decomisar la documentación que la policía catalana iba a destruir el pasado 26 de octubre.
El 17A se mencionó el informe, que fue negado
Horas después del atentado terrorista en La Rambla, del pasado 17 de agosto, El Periódico publicó que los Mossos d'Esquadra habían recibido un aviso procedente de la CIA alertando sobre un posible ataque en esta céntrica vía barcelonesa, lo que fue desmentido por el entonces presidente catalán Carles Puigdemont, el entonces conseller de Interior Joaquim Forn -actualmente encarcelado por rebelión- y el mayor de la policía catalana, Josep Lluis Trapero, destituido tras ser imputado por sedición.
En una rueda de prensa del pasado 31 de agosto, Forn y Trapero acabaron reconociendo que sí habían recibido una alerta el 25 de mayo sobre un posible atentado en La Rambla, aunque alegaron que no procedía de la CIA y que no era fiable, ya que, de hecho, el aviso no tenía ninguna relación con la célula que finalmente atentó en agosto en Barcelona y Cambrils (Tarragona).
En el informe que la Policía Nacional ha remitido a la jueza Lamela sobre la documentación incautada a los Mossos d'Esquadra el 26 de octubre a las puertas de la incineradora se subraya que existe una "nota en inglés sobre posibles ataques a turistas en Barcelona, remite USA". Esta nota, también traducida al catalán en otra versión interna del cuerpo de policía, hace referencia a la enviada en mayo, en inglés, y emitida por el NCTC, mando único antiterrorista de EEUU. El nombre original del informe 'MOS-0010/17' evidencia que la comunicación era fluida, al menos hasta 10 veces.
Los mossos confirman su veracidad
Según la información publicada este lunes, los Mossos d'Esquadra han corroborado que los dos documentos son reales y no están manipulados y han alegado que una copia digital de ambos permanece en los archivos del departamento de Interior.
De hecho, el pasado 26 de octubre, cuando una veintena de agentes de la Policía Nacional retuvo a la comitiva de los Mossos que iba a destruir la documentación en una incineradora de Sant Adrià del Besòs (Barcelona), la policía catalana ya alegó en un comunicado que los documentos en papel que se llevaban a destruir estaban en su mayoría digitalizados y que pertenecían a la Comisaría General de Información, relativos a permisos, vacaciones y bajas, así como sobre operativos y diligencias policiales del área de Información.
Cuando los Mossos intentaron destruir esa información, el área de Información estaba liderada por el comisario Manel Castellví, un mando de máxima confianza de Trapero que pidió pasar a la segunda actividad tras la destitución del mayor al frente de la policía catalana.
Entre el material incautado por la Policía Nacional frente a la incineradora figuran también documentos relacionados con el 1-O que implican a miembros de los Mossos d'Esquadra en la votación.
En concreto, los agentes de la Policía Nacional que han analizado el contenido del material incautado han hallado escritos firmados por mandos intermedios de los Mossos dando instrucciones a sus agentes sobre actuaciones previas y posteriores al 1-O para proteger la consulta, que había sido suspendida por el Tribunal Constitucional.