El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que devolverá la máxima autoridad y poder de decisión en la gestión de la desescalada a los ejecutivos de las Comunidades Autónomas que pasen a la fase 3.
Sánchez ha advertido que, a partir del día 8 de junio, una gran parte del país se encontrará en esa fase, y que el Gobierno únicamente se reservará el control de la movilidad.
El presidente ha asegurado que este último tramo en la gestión de la crisis, pese a parecer el más sencillo, está revestido de dificultades.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha informado este domingo a los presidentes autonómicos de que esta semana va a pedir la sexta y última prórroga del estado de alarma de otros 15 días, hasta el 21 de junio, y que ésta concederá a las Comunidades una "gobernanza absoluta" durante la fase 3. Entre otras cosas, podrán gestionar los tiempos de la desescalada y pedir al Gobierno que levante el estado del alarma de su territorio antes del 21 de junio.
Por ello, el presidente del Gobierno ha asumido que a partir del 21 de junio España entrará ya en la llamada "nueva normalidad", y así se lo ha trasladado a los territorios. No obstante, ya desde antes, desde la fase 3 --la última fase de la desescaladada a la que las CCAA que cumplan los requisitos podrán acceder a partir del 8 de junio-, los presidentes autonómicos, que serán en ese momento las autoridades competentes, tendrán capacidad para gestionar los tiempos, "e incluso pedir al Gobierno que levante el estado de alarma".
El jefe del Ejecutivo ha señalado que salvo la Comunidad de Madrid, algún territorio de Cataluña, como el área metropolitana de Barcelona, y algunas zonas de Castilla y León, es previsible que "la práctica totalidad" de España esté en fase 3 a partir del 8 de junio, y, por tanto, podrán pedir el levantamiento del estado de alarma.
Por ello, ha explicado que las autoridades sanitarias han planteado que sea en esa fase cuando se permita que sean los Gobiernos autonómicos los que tengan el control absoluto "para manejar los tiempos" y también para plantear "el levantamiento del estado de alarma, antes incluso del 21 de junio", en el caso de que la situación epidemiológica lo permita.