Madrid
El envejecimiento de la población es uno de los grandes desafíos que España debe afrontar. No en vano, la AIReF considera que será necesario cuadriplicar el flujo actual de inmigrantes hasta alcanzar 25 millones de extranjeros más en 2050. Según la entidad sólo esta masiva llegada de trabajadores del exterior podrá sostener el sistema de pensiones. Un análisis acertado en un contexto en el que el aumento en el peso poblacional de las personas de mayor edad anticipa un alza sustancial del gasto en prestaciones en las próximas décadas. Asimismo, el retiro de la generación del babyboom elevará aún más los desembolsos. Se trata en definitiva de un reto demográfico sin precedentes para el que las medidas incluidas en la última reforma de pensiones son insuficientes.
