
Desde que se tiene constancia en los archivos históricos, por lo menos en el Levante, siempre que en otoño viene la gota fría se producen unos aluviones de agua que habitualmente suelen ocasionar desastres en las mismas zonas y por las mismas causas.
De hecho, el catedrático de la Universidad Politécnica de Valencia, Sr. Dr. ingeniero Félix Francés, presentó hace 15 años un plan para erradicar el peligro que finalmente por desgracia se ha hecho realidad.
Mucho antes, tras la riada del año 1957 en Valencia y para intentar que no volviera a suceder, se implementó una desviación del río Turia que, indudablemente, ha servido para que los potenciales desastres ocasionados por las lluvias se minimicen enormemente.
Sin duda, los habitantes de las zonas que suelen ser afectadas por este tipo de tormentas conocen perfectamente lo que ocurre, dónde ocurre y en concreto los desastres que habitualmente suceden, e incluso cuáles son los motivos que agrandan sus consecuencias y hasta sus soluciones. Aunque después de tantos años todo continúa igual y no se ha procedido, en modo alguno, a intentar adoptar medidas tendentes a solucionarlo o al menos paliarlo de algún modo.
Parece ser que en este desastre también han concurrido negligencias en lo relativo a la gestión operativa, concretamente en cuanto a la previsión, pues los avisos de alarma fueron enviados muy tarde. Aunque, sinceramente, las noticias de que iba a venir la gota fría ya se conocían bastantes días antes de esta tragedia.
Por eso es ahora incomprensible que no se activaran los protocolos pertinentes que deben existir en la planificación de estos eventos meteorológicos en cualquier institución, empresa, etc. No se entiende, en modo alguno, por qué han ocurrido estos desastres luctuosos que han sucedido tras este desastre histórico que a fecha de hoy no deja más de doscientos fallecidos. Sirva de ejemplo la residencia de ancianos de la localidad de Paiporta, en la que lamentablemente han fallecido cinco residentes cuando se podía haber evitado.
A ver si ahora ya se empiezan a realizar las obras precisas para intentar que esto no vuelva a suceder y evitar el dolor que se deriva de ello.