El Gobierno aprobó en octubre de 2022 el reglamento de los planes de pensiones de empleo. Pero el retraso en la modificación del reglamento del fondo público ha retrasado el desarrollo de la Plataforma Digital Común, que no estará lista hasta final de año. Por si fuera poco, esta herramienta nacerá bajo mínimos con las funcionalidades básicas para comenzar a operar, pero con grandes carencias. Esto no evitará que se puedan realizar aportaciones ya en 2023, pero es evidente que echa por tierra el ambicioso objetivo que se marcó el Gobierno de quintuplicar el ahorro a largo plazo en España, hasta los 500.000 millones. Más aún si se tiene en cuenta el escaso atractivo que las empresas tienen para desplegar los planes públicos de ahorro entre sus empleados.