Eurostat desvela que el número de trabajadores que en 2050 soportarán las pensiones en España pasarán de la proporción actual de 3,3 por jubilado a 1,7. Por si fuera poco, este dato solo tiene en cuenta el número de personas en edad de trabajar, no las que realmente lo hacen.
Un detalle a tener muy en cuenta en un país que se anota el mayor nivel de desempleo de la UE. Esta previsión es coherente ante la expectativa de la jubilación de la generación del baby boom y con la baja tasa de natalidad y la esperanza de vida de los españoles.
La demografía, por tanto, añade más sombras a las ya cuestionables proyecciones del ministro Escrivá para argumentar una reforma que se presenta a todas luces como insuficiente para reducir los desequilibrios del sistema.
