
La época actual será recordada a lo largo de la historia por ser la era que diseñó una nueva normalidad. Sin duda, desde el inicio de la pandemia, los dos protagonistas han sido el virus de la Covid-19 y la tecnología, pues todos los sectores se han apalancado en la tecnología para seguir siendo competitivos en esta nueva realidad, y el sector de la salud no es una excepción.
La Inteligencia Artificial (IA) está revolucionando todos los sectores a través del incremento de la eficiencia y de los ingresos, y de la reducción de costes y riesgos. En el sector de la salud la adopción de la IA se traduce en una mejora de la calidad de vida de los pacientes y en respaldo y alivio de la carga laboral del personal sanitario. La introducción de la IA en centros hospitalarios aumenta la eficiencia de aquellos procesos en los que se implementa en niveles de hasta un +34% mientras que reduce los costes de los mismos hasta un -26%. En Europa éstas mejoras permitirían liberar entre 15 y 30 millones de horas de personal sanitario, reduciendo la sobrecarga sufrida por estos profesionales y permitiéndoles asistir mejor a sus pacientes. En este sentido, en Enzyme Advising Group también hemos liderado proyectos en este ámbito y hemos desarrollado algoritmos de IA para acelerar el diagnóstico de enfermedades pulmonares junto al Hospital Clínic de Barcelona (HCB), reconocido como el mejor hospital de España y situado en la posición 21 del ranking mundial, teniendo la innovación como uno de sus pilares principales.
El objetivo principal del uso de IA en el sector salud es poner al paciente en el centro del proceso sanitario, personalizando la atención, el diagnóstico y el tratamiento prescrito, pues la mejora de la salud del paciente es la prioridad principal. Este fue un tema que se trató en el Summit Intelligent Health en Amsterdam, donde se debatió sobre cómo la tecnología está mejorando la calidad de vida de los pacientes a la vez que permite a los especialistas dedicar más tiempo a las tareas más complejas y retadoras, dejando las más monótonas y repetitivas en manos de la tecnología.
¿En qué punto nos encontramos actualmente? En los últimos años se ha incrementado fuertemente el número y la complejidad de los casos médicos existentes; y esta tendencia continúa al alza conforme aumenta la esperanza de vida de los pacientes, que es posible gracias a los potentes avances científicos que estamos experimentando. Sin embargo, este aumento de carga de trabajo es desproporcionado y el personal sanitario se encuentra desbordado. No todo son malas noticias, pues es aquí donde la IA entra en juego para equilibrar la balanza a través de la agilización de los procesos, la priorización de tareas, la asistencia a los diagnósticos, la reasignación de recursos sanitarios dentro de los hospitales, la predicción de admisiones/altas, etc. La introducción de mejoras tecnológicas en los hospitales está creando un volumen de información creciente, lo que habilita la mejora progresiva de los resultados obtenidos por la IA, que va ganándose la confianza del personal sanitario a través de los buenos resultados que está logrando entregar.
Sin embargo, no todos los datos son igualmente útiles. Los hospitales todavía deben dar pasos en este sentido y comenzar a incorporar estrategias digitales de gobernanza y análisis avanzado de datos, que permitan una mejor captación y tratamiento de los mismos para agilizar sus procesos y obtener mayores beneficios para pacientes y sanitarios. Adicionalmente, para que las soluciones de IA implementadas aporten el máximo beneficio, además de una gran cantidad de información, requiere una diversidad de fuentes de información y la cooperación de múltiples hospitales para lograr un objetivo común. Es en este punto donde Enzyme Advising Group utiliza la tecnología Federated Learning para poder compartir el conocimiento entre distintos hospitales y departamentos a la vez que se mantiene la privacidad de los datos de los pacientes, lo que potencia enormemente el aporte de valor de las soluciones de IA.
Todo esto supone un cambio en la manera de hacer las cosas. Los hospitales no son expertos en IA. Por ello, la utilización de algoritmos y tecnología cognitiva debe estar soportada por una institución conocida que actúe como partner en todo el proceso de adaptación. La clave del sistema de salud es situar al paciente en el centro, mejorando su experiencia. Por ello, la detección temprana de las diferentes enfermedades y su tratamiento ágil y personalizado debe ser una prioridad para todos: empresas, instituciones y órganos públicos. Con estos adelantos se ahorra tiempo en visitas médicas y recursos, a la vez que se mejora la atención al paciente y se apoya al personal médico en su toma de decisiones. Indudablemente, un 'must-have' para el mañana de la sanidad.
De todo esto surge una duda, ¿cómo será el futuro del sector? El futuro será colaborativo y digital, repleto de herramientas que favorecerán la buena operativa médica y en Enzyme Advising Group queremos estar ahí al frente de la innovación. Un ejemplo de ello es la solución Komombo, que facilita y apoya a los equipos médicos, consiguiendo un conocimiento global de múltiples grupos hospitalarios que permite mejorar el tiempo de respuesta y la precisión de los procesos de diagnóstico, mejorando la salud de los pacientes. La IA es ya una realidad. Las soluciones existen. El entusiasmo por el uso de estas tecnologías aumenta progresivamente, lo que es muy positivo. Se está demostrando su valor y se está disparando el interés de la comunidad sanitaria, pero seguimos con el fiel compromiso de crear relaciones de valor con el sector para que vean la tecnología como un aliado y un beneficio para los pacientes.
Los logros conseguidos hasta este momento prevén un futuro esperanzador. La IA y la sanidad ya caminan de la mano. La época que estamos viviendo actualmente fue el pilar fundamental para que esto ocurriera, y será recordada a lo largo de la historia de la humanidad por irrumpir en la verdadera transformación digital.