
El Foro Anual de la Energía de elEconomista celebró su quinta edición marcada, inevitablemente, por una circunstancia excepcional como la crisis del Covid-19. Este sector ha sufrido también sus efectos, en forma de una fuerte caída de la demanda durante el confinamiento.
Se equivoca, sin embargo, quien asegure que las empresas que en él operan están abocadas a la parálisis. La crisis acelerará tendencias ya en desarrollo antes de la pandemia, como es el auge de las renovables. Así, el director general de la Agencia Internacional de este tipo de energía (Irena, según sus siglas en inglés), Francesco La Camara, aseguró en el Foro que es ya posible que en 2030 más de la mitad de la generación energética mundial tenga un origen verde, cinco veces más de lo hasta ahora previsto. Para ello será necesaria una ingente inversión a escala global, como los dos billones de dólares que La Camara calcula para los próximos tres años. En una movilización tan cuantiosa de recursos a largo plazo, más importante aún que el músculo financiero resulta la estabilidad regulatoria dentro de cada país. Resulta relevante que así lo subrayaran los principales representantes en España del sector energético, presentes en el encuentro de elEconomista. Su reivindicación tiene concreciones muy definidas. Los desarrollos relacionados con el hidrógeno no pueden seguir entrañando los "riesgos legales" que, con la normativa actual, se plantean.
Los líderes del sector reclaman en el 'Foro de la Energía' de 'elEconomista' un marco legal estable para invertir
Del mismo modo conviene aclarar el diseño de las próximas subastas de renovables, tras la incorporación de criterios como el impacto social de los proyectos. Sólo con unas reglas de juego claras las energías verdes serán aún un foco de atracción de inversiones en España, capaces de garantizar que nuestro país no se quede atrás en la transición ecológica.