
La reunión de Trabajo con los agentes sociales se saldó ayer con la aceptación, por parte del Gobierno, de la prórroga de los Ertes de fuerza mayor total hasta octubre. Se ha logrado que su vigencia, por tanto, no decaiga el día 30 de este mes, pero conviene moderar todo triunfalismo.
La prórroga de estos expedientes en los meses del verano estará sujeta a descuentos en las exoneraciones de las cuotas de la Seguridad Social. Y, sobre todo, debe considerarse que nuestro país queda por detrás de otros Estados de la UE, en los que la extensión se ha garantizado hasta finales de año. Considerando la lentitud con la que está avanzando la reactivación, y el alto riesgo de reacaídas, las empresas españolas aún pueden ver comprometida su supervivencia.