Sánchez ha conseguido sacar adelante la cuarta prorroga del Estado de Alarma. Hasta el 24 de mayo. Ha ganado en votos, pero no en palabras. Eso es importante en un Gobierno minoritario como el suyo, que depende de otros grupos para sacar adelante sus propuestas. Los avisos de la oposición, los que le apoyan, los que se abstienen y los que se oponen, todos los grupos que no forman parte del Gobierno y por tanto son mayoría en la Cámara, se han quejado de su talente. Le acusan de no dialogar, de equivocarse y actuar precipitadamente. Algo que niega el Presidente del Gobierno alegando que habla con todos, incluyendo los Gobiernos autonómicos.
Al Gobierno le ha salvado Ciudadanos con sus 10 diputados y algún voto más. Diputados que ni le votaron en la moción de censura, ni en la investidura y que ahora le ha dado el apoyo condicionado, precisamente pidiéndole, entre otras cosas, que dialogue a partir de ahora.
Por el contrario, le han negado el voto a favor cada vez más grupos parlamentarios de los que le ayudaron, como ERC que votó ayer en contra de esta prórroga. Si tiene que contar con los contrarios y se va enajenando los aliados algo está haciendo mal el Gobierno.
No se puede aplicar una dictadura contra la gran mayoría de la población
España sigue en "Estado de Prorroga" hasta el 24 de mayo. Pero esta vez es distinto, porque va a ser compatible con la desescalada improvisada, compleja y asimétrica que ha planificado el Gobierno. Este estado de alarma no va a ser como el de los tres que hemos vivido hasta ahora. No lo va a ser porque cada autonomía y, probablemente, cada territorio dentro de ellas se va a ir desescalando a su medida. Si la desescalada programada por el Gobierno era improvisada y un lío, la de ahora…
Además, el Gobierno no debe engañarse, se puede confinar a los ciudadanos un periodo, dos periodos, tres, cuatro,… Pero va a llegar el momento en que poco a poco se vaya desalarmando cada ciudadano por su cuenta, luego en grupos y finalmente, como se ha visto en las calles, estos días, explotará (¿si te vistes de chándal estás paseando o haciendo deporte tengas la edad que tengas?).
Al final el caos, porque lo que no se puede hacer es aplicar una dictadura contra una gran mayoría de la población. La quinta prórroga será muy difícil de pedir por ningún Gobierno, sea el que sea, y menos aún a más largo plazo.
¿Cómo va a sentar esto a las empresas, a los inversores, a los autónomos, a los trabajadores, a los clientes internos, a los turistas, a los que nos compran en el extranjero, a los que mueven la economía?: con alarma como cualquier aumento de incertidumbre.
En el cogote del Presidente Sánchez soplan vientos de zozobra. Cada vez está más cercano el momento en que se necesite ayuda financiera desesperada de Europa y acepte un "rescate", que sus asesores disfrazarán con la habilidad que les caracteriza. Pero será eso: un rescate.
¿Cómo evitar ese desalentador panorama? Lo vienen diciendo los expertos de todo tipo: cambiando políticas y composición del Gabinete; integrando en él personas que propicien un serio pacto económico social, tranquilicen a los mercados, recobren confianza de inversores y de dirigentes europeos. Como diría el filósofo francés Derrida: "Deconstruir el Gobierno".
Los datos del paro registrado de "marzo" crearon la sospecha de que nos acercaban al rescate. Con los datos de abril (282.891 parados más sin contar los Ertes) y los que tenemos que esperar para mayo ya no será una sospecha, será una evidencia.
Con alarma y sin alarma, el Gobierno está tocado parlamentariamente. Eso no quiere decir que el Presidente lo esté. Él puede cambiar el Gobierno, cesar y cambiar ministros. Sin embargo, no le pueden quitar la presidencia. La matemática parlamentaria lo hace imposible. Si aguanta unos años más de Presidente de Gobierno español podrá conseguir un puesto internacional. Para eso, como es español, habrá que apoyarle…
En todo caso antes hay que: deconstruir el Gobierno, para desalarmar la economía, des-escalando la situación sanitaria.