
La UE llega a la inauguración de la cumbre sobre cambio climático de Madrid con una inversión en este capítulo del 1,2 por ciento del PIB. Sorprende que el adalid ecológico global dedique a este capítulo menos que EEUU o China.
A ese ritmo es muy posible que Europa no cumpla su muy ambicioso plan de reducir las emisiones contaminantes un 40 por ciento en 2030. No obstante, conviene ser conscientes de la ingente inversión (hasta 500.000 millones al año) que llegar a esa meta exige. Es más, convendría revisar las metas para que se adapten de forma más realista a una economía como la europea, de escaso crecimiento, con dificultad para que el crédito fluya (pese a la abundancia de liquidez) y en la que muchos Estados deben bajar su déficit.