Alquiler barato sin intervencionismo

La nueva edición del informe mensual La vivienda a fondo, que elEconomista elabora con la colaboración de Aedas, Altamira y Century 21, anticipa todo un revulsivo en el mercado del alquiler residencial. El interés de los fondos de inversión de mayor tamaño posibilitará que 40.000 nuevas viviendas se oferten a posibles inquilinos en los próximos dos años y medio.

La mayoría estará ubicada en una de las zonas donde los precios han sufrido una mayor presión alcista en los últimos años: Madrid. El claro apetito de los inversores privados por embarcarse en este tipo de promociones desmiente, en primer lugar, el pesimismo de quienes creen que el inmobiliario español entra en una corrección semejante a la que vivió antes del estallido de la crisis financiera. El hecho de que los precios de compraventa en el residencial se estanquen, o experimenten ya algunas caídas, no implica que dejen de existir oportunidades en el alquiler.

El problema del alto precio de los arrendimientos no se halla en una supuesta especulación sino en una oferta escasa

Con todo, la verdadera importancia de estas nuevas operaciones radica en su gran potencial para mitigar la causa que ha convertido el arrendamiento de vivienda en casi inalcanzable para colectivos como los jóvenes. El problema no estriba en la especulación o los supuestos abusos de los propietarios sino en una oferta de alquiler que evoluciona mucho más lentamente que la demanda.El panorama cambiará gracias a estas nuevas inversiones de fondos y a los planes de Fomento para conceder la gestión de suelo público durante 50 años a promotoras privadas, como el ministro Ábalos anunció en el último Ágora de elEconomista. Este tipo de medidas, tendentes a estimular la oferta, y en las antípodas de todo intervencionismo en precios o contratos, son las que el mercado necesita.