
Cuando llega el verano, miles de conductores se lanzan a las carreteras con sus caravanas en busca de recorrer el país, visitar preciosas playas y dormir bajo la noche estrellada. Viajar con este vehículo es una excelente forma de conocer lugares nuevos desde la comodidad de "casa", además, al llevarla enganchada al coche mediante un remolque, es posible disfrutar de distintos tipos de conducción.
No obstante, al igual que el resto de vehículos, las caravanas se acogen a una serie de leyes impuestas por la Dirección General de Tráfico, que deben ser acatadas para evitar multas y evitar accidentes innecesarios. La DGT advierte de que su conducción requiere cierta práctica y ser cuidadoso ya que, hacia delante es relativamente fácil, pero puede complicarse a la hora de hacer ciertas maniobras.
La velocidad máxima de las caravanas
"Es fundamental adaptar la conducción a las condiciones del remolque que arrastremos: las características del vehículo tractor, las dimensiones y el peso del remolque, la velocidad de circulación o las condiciones atmosféricas son factores a considerar, pues afectan directamente a la estabilidad y la seguridad en la circulación del conjunto. Estas son las principales precauciones a tener en cuenta cuando enganchamos un remolque a nuestro coche", explica la DGT.
Respecto a la velocidad máxima a la que puedes conducir con una caravana, la DGT es clara, "las caravanas tienen una limitación específica: a 90 km/h en autopistas y autovías." Por lo que si estás pensando en hacer un viaje largo con este vehículo, debes saber que el coche que lo remolca jamás podrá sobrepasar esa velocidad establecida.
Respecto a las carreteras convencionales, la Dirección General de Tráfico estipula que las caravanas jamás podrán superar los 80 kilómetros por hora. Además, recalcan la importancia de tener en cuenta que se está conduciendo un vehículo de mayor longitud por lo que a la hora de adelantar es necesaria una mayor distancia entre los vehículos y una maniobra más larga.
La DGT concluye que "es aconsejable el uso de marchas cortas cuando el vehículo se encuentre en pendientes: esto beneficiará la seguridad de los pasajeros y hará que el motor no se dañe. Con el remolque las inercias y los esfuerzos que debe soportar el coche serán mayores, por lo que es importante que te anticipes a los imprevistos que puedan surgir en la carretera."
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