Valencia
Uno de los mayores motores de la industria del metal valenciana, la factoría de Ford de Almussafes, fabrica actualmente un único modelo, el Kuga, y aplica un Erte RED que si bien garantiza la continuidad de la plantilla supone que cada día trabajen 1.000 personas menos y que días e incluso semanas de parada de la planta. Una situación que su industria auxiliar también sufre y que ha desplomado la producción de esa industria un 55,3% en el primer trimestre del año, según la patronal Femeval.
El último informe de coyuntura de la patronal del metal valenciano lanza un claro mensaje de alarma ante la situación, conocida desde hace meses tras el anuncio de Ford de que traerá a Valencia un nuevo modelo híbrido en 2027 pero que no por ello deja de ser grave. "El metal de la Comunitat Valenciana atraviesa una situación crítica", asegura Femeval, ya que el desplome del automóvil está afectando a toda la industria de este sector.
Según el informe, la industria del metal valenciano ha perdido 11.363 empleos de enero a marzo, lo que representa una caída del 10,5% respecto al mismo periodo de 2024. Hay que tener en cuenta que a los mínimos productivos en que se encuentra Ford en Almussafes se suman los efectos de la DANA, que golpearon a algunos proveedores e industrias del sur de Valencia.
"En el sector de la industria del metal se encienden todas las alarmas", recoge el documento, ya que en el conjunto de la actividad industrial vinculada al metal la caída de su índice de producción industrial es del 13,5% y el descenso en el volumen de sus exportaciones es del 15,4%, respecto a las cifras de hace un año. En el caso de las ventas al exterior, el automóvil pierde un tercio de sus exportaciones respecto a 2024, en que ya estaba en franco retroceso también por Ford.
La evolución del conjunto
La difícil situación del automóvil marca a la totalidad del sector del metal valenciano. Así, el primer trimestre del año, el conjunto del metal ha cerrado con una caída del 13,5% en la actividad productiva y del 3,9% en el empleo equivalente a 9.360 puestos de trabajo menos.
En total, el volumen de exportaciones del metal se ha reducido de 3.163 millones a 2.728 millones de euros en el primer trimestre de 2025. "Esta paulatina disminución sitúa al sector por debajo del 30% de su contribución histórica al total de exportaciones valencianas. Y todo ello sin contar aún el efecto que pueda tener la política arancelaria con EE.UU", destacan desde Femeval. La caída está afectando también a la balanza comercial valenciana, cada vez más cerca de entrar en déficit.
Como únicos datos favorables, Femeval destaca el crecimiento mantenido de la actividad del subsector de fabricación de material y equipo eléctrico y electrónico (13,4%). En cuanto a ocupación, es significativo el repunte en el comercio al por mayor de metal con 8.900 puestos más creados en un año alcanzando los 35.500 y la creación de 900 empleos en las empresas instaladoras del metal situándose en 49.000 personas trabajadoras. En materia exportadora, también es reseñable el buen comportamiento del Material Eléctrico (+9,7%) y aunque en cifras todavía modestas del sector aeroespacial valenciano (+65,5%).
A vueltas con los aranceles
En la encuesta de Femeval a sus asociados que incluye el informe, solamente el 3% de las empresas del metal estiman que las medidas arancelarias de Donald Trump tendrán un efecto directo. En términos objetivos, las exportaciones valencianas del metal se concentran en los países europeos, y la exposición directa a Estados Unidos es moderada. En 2024 las exportaciones a EE.UU representaron el 9% del total, concentrándose en tres subsectores: Aparatos y Material Eléctricos, Maquinaría y Aparatos Mecánicos, y en el de Aparatos Ópticos, Medida y Médicos.
"La exposición indirecta a la que pueden verse afectadas las empresas es más difícil de concretar, pues depende tanto de la proporción de inputs del metal valenciano que se incorporan a las exportaciones de sus socios comerciales dirigidas a Estados Unidos, como a través de los potenciales efectos sobre el crecimiento asociados a los aranceles. Pero, en general será mucho mayor a los efectos directos", señala el informe. Un 40% de las empresas estiman que se verán afectadas de manera indirecta.
Respecto al grado de repercusión que las medidas proteccionistas iniciadas por Trump, dos tercios de las empresas afectadas (66%) la cifran como un efecto moderado, hasta un máximo del 5% de las ventas de la empresa. Un 27% cifran la repercusión con un efecto importante, y el 7% de las empresas afectadas estiman que el efecto puede ser muy importante.
La realidad es que en el primer trimestre de 2025 las exportaciones valencianas del metal a EE.UU. han aumentado más de un 12%. "Los mercados se anticipan a la errática política arancelaria iniciada por Trump, adelantando el circuito comercial con este país, pero habrá que esperar para conocer las repercusiones reales de estas medidas", destaca el presidente de Femeval, Vicente Lafuente.