Desde las 15.00 horas de este viernes, 31 de marzo, arranca oficialmente la Semana Santa en lo que a tráfico y desplazamientos se refiere. A lo largo de estos días, se prevén hasta 16 millones de desplazamientos, siendo uno de los periodos del año en los que más densidad de tráfico se da en las carreteras.
Para este primer fin de semana, se prevé un gran número de desplazamientos, estimado en unos 4,3 millones. Y dado que en estas mismas fechas el año pasado se registraron 25 siniestros mortales en los que fallecieron 27 personas, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha, como cada año, la primera fase de la Operación Especial de Tráfico de Semana Santa. Esta primera fase comprende el primer fin de semana, desde las 15.00 horas del viernes 31 de marzo hasta la medianoche del domingo 2 de abril.
En esta ocasión, el organismo de tráfico está insistiendo en la importancia de extremar las precauciones en caso de tener que bajar del vehículo en carretera, así como en evitar conductas de riesgo al volante como el alcohol (causante de uno de cada tres siniestros mortales de tráfico) o la velocidad.
Horarios más desfavorables
Las previsiones de circulación elaboradas por Tráfico contemplan que desde primeras horas de la tarde del viernes (de las 15 a las 22 horas y, especialmente, entre las 18 y las 21 horas) podrán producirse problemas de circulación y retenciones en las salidas de las grandes ciudades, además de en los accesos a zonas turísticas de costa al coincidir los desplazamientos de largo recorrido por el comienzo del periodo vacacional con los movimientos cortos habituales de fin de semana.
El sábado por la mañana continuará el tráfico intenso de salida de los grandes núcleos urbanos (entre las 9 y las 14) y que se añadirá a la circulación de vehículos cuyo destino sea las zonas de recreo y esparcimiento cercanas a ellos.
El domingo se cerrará esta primera fase de la operación especial con el retorno de los que han disfrutado del fin de semana por lo que se producirán retenciones por la tarde-noche (especialmente entre las 18 y las 22) en los accesos a las ciudades, aunque de menor intensidad que otros domingos.